La coalición, con 12 diputados, renace como un grupo paritario y más jovenhttp://www.diariocordoba.com/noticias/cordobaandalucia/iu-cambia-de-genero_707473.html
Diego Valderas, junto al salón de plenos de la Cámara, con las seis diputadas del grupo de IU, que estrenan escaño después de cuatro años sin mujeres parlamentarias
Hace 12 años, en pleno proceso de sucesión por la dirección de Izquierda Unida en Andalucía, se abrió un debate sobre si la federación de izquierdas había madurado lo suficiente como para nombrar a una mujer coordinadora regional. El tema lo había puesto sobre la mesa, de forma nada casual, la exalcaldesa de Córdoba Rosa Aguilar. El entonces coordinador general de IU, Julio Anguita, zanjó el debate de forma abrupta: "Lo de mujer u hombre me parece que son concesiones a esta especie de Corte Inglés en que se está transformando la política".
Diego Valderas fue elegido coordinador regional aquel año y doce años después sigue siéndolo. Durante los últimos cuatro años y tras la salida de Concha Caballero, IU no ha tenido a ninguna mujer en su grupo, y este "Corte Inglés en el que se ha transformado la política" prácticamente le ha impedido defender las políticas de igualdad sin que el PSOE le echara en cara que en su bancada solo había hombres.
La nueva Izquierda Unida que ha surgido de las elecciones autonómicas del 25 de marzo es un partido paritario, con seis hombres y seis mujeres. Lo es porque distintas corrientes dentro del partido han presionado y se han movido para cambiar la imagen pública de IU, para que los valores de igualdad no solo estuvieran presentes en el discurso, sino en la apariencia. "IU es más de izquierdas con mujeres en el Parlamento", dicen. Y si lo es, también se debe a que el coordinador regional ha puesto todo su empeño para enmendar "un error del pasado que ya nadie entiende". En su último año de poder orgánico, Valderas propuso al comité regional que al menos el 40% de las listas provinciales para las autonómicas estuvieran encabezadas por mujeres. No bastaba con que fueran de número dos en listas cremallera, como dictan los estatutos.
GRUPO DE VARONES Las dificultades de IU para lograr representación en las provincias más pequeñas hacen casi imposible que el número dos logre escaño. Eso también se sabía en el 2008, pero se obvió, o no hubo ninguna voz de peso en la dirección que pulsara el piloto rojo: IU podría ser el único grupo parlamentario representado exclusivamente con hombres. Así ocurrió. Y durante cuatro años, si Valderas intentaba ignorar esa realidad, el PSOE se encargaba de recordárselo.
El coordinador regional de IU nunca encontró argumentos sólidos para contestar a Griñán. Su formación siempre ha sido proactiva en las propuestas y el diseño de las políticas de igualdad. IU apoyó la Ley de Igualdad de género en el 2007, respaldó los planes contra la discriminación en todas las políticas públicas y defendió la asignatura de Ciudadanía, cuando fue recurrida en los tribunales por hablar de identidad de género. Pero la política es también imagen. Así que cuando IU ha protestado porque el PSOE no era suficientemente sólido en su defensa de la igualdad --por ejemplo contra los colegios que segregan al alumnado por sexo--, los socialistas nunca han podido reprimirse el reproche, forzando a IU a enfrentarse con sus contradicciones. "Nuestros compañeros en el Parlamento siempre han sabido defender el mensaje feminista de IU. Pero la imagen pública que dábamos no era buena", admite Alba Doblas, número uno en Córdoba.
Entre las seis diputadas de IU hay tres cabezas de lista: por Almería (Rosalía Martín), por Córdoba (Alba Doblas) y por Granada (Carmen Pérez), más las nú- mero dos en Sevilla (Marina Segura), Málaga (Lola Quintana) y Cádiz (Inmaculada Nieto). Se estrenan en un Parlamento con 56 caras nuevas de 109 diputados: 57 hombres y 52 mujeres. Con ellas, no solo ha cambiado el género y la fisonomía de IU. La coalición de izquierdas acaba de dar un salto generacional hacia atrás, y su edad media se ha visto rejuvenecida diez años. Entre las seis mujeres hay tres abogadas, una licenciada en ciencias políticas, una trabajadora social y una formadora ocupacional. Todas tienen una larga trayectoria política, algunas con actividad sindical, cuatro afiliadas al PCA y dos son independientes.
CUOTA FEMENINA "Siempre ha habido mujeres en la dirección de IU, pero también tenemos techo de cristal. No somos una excepción. Estamos arriba, pero no se nos ve. Nos faltan portavoces", explica Nieto. En IU hay más hombres afiliados que mujeres, y los órganos de dirección están masculinizados. En esto no es distinta a otros partidos. "Yo soy partidaria de la cuota femenina. La meritocracia es subjetiva, porque para acceder a esos méritos el punto de partida tendría que ser el mismo para todos, y aún no se dan esas condiciones de igualdad entre hombres y mujeres", sostiene Doblas. "IU ha arrastrado un déficit. Pero ahora nuestra oportunidad es doble, porque haremos más paritario no solo el grupo, sino el Parlamento", advierte Quintana.
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