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David Sánchez y Juan Pedro Ruiz son los dos policías locales que auxiliaron a la madre del menor fallecidohttp://www.abcdesevilla.es/andalucia/20130428/sevi-policias-auxiliaron-nino-ahogado-201304280929.html
David Sánchez (derecha) y Juan Pedro Ruiz, ayer, en la Jefatura de la Policía Local
No había tiempo para titubeos. La situación era crítica y había que actuar. Y así lo hicieron. «No somos héroes. Tan sólo cumplimos con nuestro trabajo». Así se pronuncian David Sánchez y Juan Pedro Ruiz, los dos policías locales, miembros de la unidad 092, que se arrojaron el viernes al Guadalquivir «sin dudar» para tratar de rescatar a la mujer y a su hijo que se habían precipitado al río desde una zona cercana al Puente de Miraflores.Ambos agentes, que llevan ya once años en la plantilla, estaban en la Jefatura cuando entró una llamada de la Policía Nacional alertando de lo sucedido. «Fuimos hasta el lugar, cada uno con su compañero, y nos distribuimos a lo largo del cauce. Los dos coincidimos a la altura del Hesperia», señaló ayer Sánchez.Entonces, después de otear bien la superficie del antiguo Betis, vieron una cabeza flotando. Era la madre, que gritaba pidiendo auxilio. El primero en lanzarse al agua fue David. «No pensé en nada. Sólo me tiré. En un principio me pareció que no era peligroso, pero cuando entré en el río me di cuenta de que había mucha corriente y que me tapaba; tenía que nadar de lado», apuntó el agente, que añadió que «cuando llegué hasta ella, me agarró fuerte e incluso me hundió porque estaba muy nerviosa, pero luego consiguió controlarse».A continuación, Juan Pedro entró nadando a toda prisa para ayudar a los dos. «Ni siquiera llegué a ver a la mujer, sólo a David. Me quité las botas y los pantalones, y me tiré».Con mucho esfuerzo, lograron llegar a una zona de seguridad del Puente de San Rafael. La mujer se encontraba en estado de shock y sólo preguntaba por su hijo. «Pero no actuaba de forma coherente. Ofreció datos contradictorios sobre su domicilio, la edad del pequeño y cómo había sucedido todo. De hecho, nos pareció muy raro todo lo que decía. Incluso llegamos a dudar de que hubiese niño», manifestó David.
«La mujer se quiso tirar de nuevo al agua varias veces para buscar al menor»
El rescate se hizo más complicado porque la zodiac de los bomberos no podía acceder a la zona en la que se encontraban los tres. «En todo ese tiempo, la mujer se quiso tirar de nuevo al agua en varias ocasiones para buscar al menor», indicó Juan Pedro.
El vástago apareció una hora después, aproximadamente. Su cuerpo había quedado atorado en una rama. Fueron los efectivos del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento quienes rescataron el cadáver. «A la madre no se le dijo nada en ese momento porque estaba muy nerviosa. Fue muy duro», dijo David.Ambos agentes destacaron que la coordinación, tanto con Policía Nacional como con los bomberos, fue perfecta. «Si no, estoy convencido de que no hubiésemos logrado sacar a ninguno con vida», manifestó Juan Pedro. Pese a haber salvado a la madre, estos agentes lamentan el fallecimiento del pequeño. «Nuestro objetivo era sacar a los dos. El final fue muy triste».Reconocen que la situación fue más que impactante. «Los dos tenemos niños chicos y de edades similares a la de la víctima. Nadie está preparado para algo así, nos afecta como a cualquier ciudadano», con el añadido de que ellos lo vivieron de cerca. «Hasta el momento, no nos habíamos enfrentado a un suceso similar». Y jamás lo olvidarán.
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