Sábado, 8 de Marzo, 2014
La fiscalía estatal acusará de interferencia con la custodia de sus
hijos a Carrie Weingarth, la madre que sacó a su hijo de 12 años de un
colegio de Cutler Bay sin permiso y se lo llevó con sus dos hermanos a
California, donde fue arrestada tras una semana de una intensa atención
mediática sobre su caso.
El vocero de la fiscalía, Ed Griffith,
dijo el viernes que esperan que Weingarth, quien permanece en una cárcel
del condado de San Bernardino, en California, sea extraditada para
comenzar con los trámites. Su novio, Christian Coello, fue liberado la
semana pasada.
Tanto el investigador privado que trabaja para la
familia, Joe Carrillo, como el abogado de Weingarth, Enrique “Rick”
Yabor, creen que los cargos no prosperarán.
“No hubo ninguna interferencia con la custodia”, dijo Carrillo,
quien afirmó que el colegio donde estudiaba Erin Peña, el hijo mayor de
Weingarth, ni siquiera tenía el derecho de impedir que la madre se lo
llevara.
Weingarth acudió el 14 de febrero al colegio Gulfstream
Elementary, donde estudiaba su hijo mayor. Pidió permiso para llevárselo
y se lo denegaron, pero logró sacarlo de la escuela, según la orden de
arresto estatal.
Peña, quien vivía con su hijo y lo había
registrado en la escuela, prohibió en un documento al colegio que
Weingarth se llevara a Erin, porque, aseguraba, la madre tiene problemas
psicológicos y usaba drogas.
Carrillo también afirmó que
Weingarth pasó limpia una prueba de drogas que le hizo el Departamento
de Niños y Familias tras una denuncia anónima.
Las reglas de la
Junta Escolar del condado afirman que los padres pueden tener acceso a
los estudiantes o permitirles que dejen la escuela durante horas de
clase a no ser que haya un documento jurídicamente vinculante o una
orden judicial que ordene lo contrario.
Sin embargo, la custodia
de los hijos de Weingarth y Steven Peña, quienes nunca estuvieron
casados, no estaba regulada por ninguna decisión judicial. Los padres
habían acordado verbalmente que compartirían la custodia, afirmó el
padre, quien añadió que siempre tuvieron problemas para compartir la
custodia de los niños.
“No creo que el padre tenga la autoridad de
decir eso [ordenar que el colegio no deje a la madre recoger a su
hijo]”, afirmó Bernard P. Perlmutter, profesor de derecho en la
Universidad de Miami. “No le corresponde al padre. Le corresponde a un
juez”.
La orden de arresto estatal no menciona la existencia de
ninguna orden judicial que impidiera a Weingarth recoger a su hijo y en
el registro de la corte de familia no aparece ninguna orden al respecto.
Perlmutter
señaló que aún así Weingarth podría haber interferido con la custodia
del padre si se prueba que tenía la intención maliciosa de privar a Peña
de la custodia de su hijo.
La policía escolar de Miami Dade
obtuvo una orden de arresto contra Weingarth tres días después de que la
mujer se llevara a su hijo y cuando se estimaba que ya habían salido la
Florida. Al día siguiente, asistió a Peña para que éste pidiera la
custodia de sus hijos en un tribunal de familia, que se la concedió.
Tanto Carrillo como Yabor afirman que Weingarth no quiso privar al padre de la custodia de sus hijos.
Carrillo
afirmó que tras recoger a su hijo, fueron a sacar dinero de la
devolución de impuestos de Weingarth, fueron a comer a un restaurante de
Kendall, compraron juguetes en un Toys R Us cercano y fueron Dadeland a
comprar ropa para Weingarth y para los niños. Luego volvieron al área
del colegio a una tienda de productos de tabaco.
Si un padre o
madre cree que su hijo corre peligro con el otro progenitor puede
llevárselo y tiene diez días para comunicarlo a las autoridades, según
los estatutos de la Florida.
“Nunca le dieron esos diez días”, afirmó Yabor. “Es un fallo de la orden”.
Weingarth
rellenó unos formularios de petición de asistencia por violencia
doméstica en el 2012 en su nombre y en el de sus hijos. En uno de ellos
dijo que Peña la había agredido y había amenazado con matarla. Peña negó
haber maltratado a Weingarth o a sus hijos. La mujer nunca entregó los
documentos a la corte.
Ni la policía escolar ni la fiscalía quisieron comentar sobre este punto cuando la fiscalía aún estaba preparando el caso.
El
vocero de los colegios públicos de Miami Dade, John Schuster, señaló
que el cargo de interferencia con la custodia contra Weingarth no era
por interferir con la custodia del padre sino con la custodia de la
escuela, que en ese momento estaba al cargo de Erin.
Sin embargo, Yabor aseguró que la escuela no puede tener la custodia legal de un niño.
Enlaces de la noticia original:
http://www.elnuevoherald.com/2014/03/08/1697132/presentaran-cargos-contra-madre.html
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