Sábado, 25 de Abril, 2015
Curiosos todos los puntos de vista de esta noticia, y sus analisis, pues echarmos en falta la idea de que para aceptar en la convivencia de la unidad famliar a otra persona habría que lo primero valorar si es prudente, más que incluso esa repercusión sobre la aceptación de los menores.
Si alguién ha pasado por un proceso de separación de sos que son podría calificarse de destructivos, más le valdrá haber aprendido con sufrimiento aquelllo que fue capaz de entender por disceniminento. Pues hoy día el futruo de las parejas bajo una convivencia en común, no es que se haya convertido en algo diferente de otras generaciones, sino que se ha dado un vuelco al 100%. Antes las uniones maritales se producían y suponían un compromiso casi de por vida, pero hoy día la situación es la inversa, y muchas uniones duran menos aún que los noviazgos, si es que éstos existieron.
Con lo cual a la hora de meter a una persona en la vivienda y más con hijos de por medio, lo primero en lo que habría que pensar es ellos, pues no es una actitud muy responsable desde el papel de cualquier progenitor pensar primero en su bienestar personal antes que en el de lso menores, y meter a un caballo de Troya en tu propia casa y en convivencia con tus hijos es algo que cuando menos merece una reflexión seria.
Pero una vez más se piensa primero en el beneficio personal de los progenitores, y más aún se el progenitor es el materno, la madre. A esta se permite y tolera cualquier acción, pues no es sólo que metan a las nuevas parejas en la vivienda famliar la cual encima costea el padre de los menores, sino que además se les permite y tolera que si ellas deciden que para continuar con sus vidas y su felicidad, éstas conllevan que hayan de mudarse a otro entorno distinto al del referente de los menores en su vida, puedan hasta trasladarse de país y alejar por completo a los menores de su padre y demás familia. Pues aquí lo que prima es que el estado de felicidad y bienestar materno se hayen satisfechos, pues ellas han de vivir o como princesas y por supuesto como después reinas.
Al mismo tiempo echamos de igual forma en falta que la noticia alude a cuando es esta nueva persona que se introduce dentro de una familia quien por celos, envidia u otros termina provocando un distanciamiento y/o enfrentamiento de los menores no sólo con ellas, sino contra el propio progenitor.
Fuente:
"No me gusta la novia de mi padre"
http://www.hoy.es/sociedad/educacion/201504/22/gusta-novia-padre-20150422080530.html
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