CUSTODIA PATERNA: Cómic: las mujeres acaban con el reinado de las firmas masculinas

miércoles, 11 de junio de 2014

Cómic: las mujeres acaban con el reinado de las firmas masculinas

Miércoles, 11 de Junio, 2014

Ilustración 'Mujeres despechadas'

- Varias jóvenes han entrado en el mundo de la viñeta con una manera de entender el género: Moderna de Pueblo, Laura Santolaya o Carolina Selmes.
- "No son obras de y para mujeres", reclaman, "el problema lo tienen ellos que a priori lo juzgan para chicas".
- El humor es también una conquista femenina, ya que parecía hasta hace no tanto tiempo territorio de hombres.

Hay vida, mucha vida, después de Maitena. Tanta que el 'apellido' habitual con el que se encuentran las mujeres viñetistas que se están haciendo con una buena parte del mercado, y abriéndolo, es Maitena.
A ella le debemos mucho, fue la primera" dice Moderna de Pueblo (Raquel Córcoles, Reus, 1986) que acaba de publicar Cooltureta, "y aunque hoy se la critica a veces porque puede parecer machista, en su día fue muy rompedor y moderno liberar estereotipos de ama de casa".

El cultureta es la clase de persona que prefiere decir novela gráfica en vez de cómic

Hace Raquel alusión a su nuevo trabajo, una amable parodia de lo hipster: "Es como si dicen que nosotros estamos criticando con mala leche y no es así". Habla en plural porque su pareja firma también esta divertida visión de los culturetas o como ellos han bautizado: 'Coolturetas'.

El subtítulo lo deja claro: La novela gráfica junto a un tachado El cómic. "El cultureta es la clase de persona que prefiere decir novela gráfica en vez de cómic" señala la autora de Soy de pueblo y Los capullos no regalan flores.

"Quino creó a Mafalda y nadie diría que es para mujeres"
"Creo que antes el cómic estaba asociado al público masculino y al típico friki que dibuja y lee tebeos y ese concepto ha variado" señala otra de las viñetistas que están cambiando el panorama, Laura

Santolaya. "¿A quién no le gusta ver ilustraciones bonitas? pregunta esta creadora navarra de 33 años, cuya primera obra, Los lunes me odian, ha sido un éxito. "Hay una generación de mujeres a la que se nos ha dado un poco de voz en un mundo en el que antes no la teníamos" explica.

Antes el cómic estaba asociado al público masculino y al típico friki que dibuja y lee tebeo

Generación a la que pertenecen las irónicas y muy polémicas autoras de Muerte a los hombres malos, Laura Torné y Caroline Selmes, que han levantado ampollas con sus viñetas, de las que es fácil hacerse idea con el título. "De todas formas, desde el primer momento creímos que esto no podía acabar aquí. Así que, cuando nos cansemos de matar a hombres malos queremos hacer también un Muerte a las mujeres malas, Muerte a las mascotas malas, Muerte a las celebrities malas" avanzan las también autoras de Muerte a los hombres que piensan.

Encantadas Torné y Selmes de pertenecer al grupo de mujeres que ha entrado en el cómic con temas diferentes y un humor que se presuponía a los hombres, cuentan las pasiones (a veces muy intensas y no en el mejor sentido) que suscitan sus viñetas en el sexo contrario: "Algunos lo odian y nos odian. A otros les encanta y nos felicitan".
No esperaban estas dos mujeres que le han sacado los colores a unos cuantos hombres con su paródica muerte a los varones 'malos' crear tanto revuelo: "Jamás pensamos que podía levantar tanta polémica. Hemos recibido muchas críticas de hombres ofendidos y a todos les respondemos lo mismo: es humor absurdo 100% y nuestra intención tan solo es divertirnos y divertir, tanto a mujeres como a hombres. En el libro matamos a muchos hombres de nuestros entorno a los que queremos".

Más 'seria' se muestra otra de las autoras de cómic que están sacando el género de los márgenes masculinos, Mamen Moreu (Huesca, 1985), al tocar el tema: "Se ha hablado de cómic para mujeres y/o para hombres durante muchos años, (Princesitas y tebeos de amor para las chicas y caballeros y bárbaros para los chicos). Lo que estaría bien es que dejase de existir esa visión del medio de una vez por todas".
Continúa su protesta la autora de Resaca: "Todo es para todos, nunca me ha gustado que me digan qué tengo que hacer, leer, vestir por ser mujer, igual que me parece absurda la etiqueta de "Para hombres". Está claro que cualquier etiqueta que sexualice está hecha desde el prejuicio, y en los cómics no iba a ser menos. Yo dibujo cómics de humor, soy una autora pero sin importar el género, que cogorzas nos cogemos todos".

eso no quiere decir que mis cómics sean para mujeres, es más, espero que mucha gente se vea representada". Y aquí ya sí sale el humor que marca su obra: "

Me parece absurda la etiqueta de "Para hombres"

Moderna, que antes de Cooltureta había publicado Los capullos no regalan flores, cuenta que tras su nueva obra, protagonizada por un hombre, algunos han decidido acercarse al anterior. Y sabe el motivo, van a 'Los capullos..." tras haber leído el que no aparentaba ser cosa de y para chicas: "Los que marcan 'esto' son los hombres, porque son quienes deciden no leerlo. Qué

pena que por ser mujer y tratar un tema aparentemente romántico les dé alergia. Enseguida catalogan lo que haces como humor femenino".
Y la protesta viene sola: "Yo nunca digo 'humor masculino' por mucho que hablen de vestuarios de tíos o de coches. Ni haciendo un chiste de su pene lo digo. Para ellos en cambio enseguida estamos hablando de cosas de chicas".
Laura Santolaya casi lo tiene asumido como parte de lo inevitable: "Mi cómic lo leen más mujeres, es un personaje mujer, y yo soy una mujer, y es verdad que me sale más fácil hablar de la depilación, o cosas con las que a una mujer se suele sentir más

identificada". Pero ¿y no leemos nosotras asuntos mucho más de hombres y aún así pueden interesarnos?, ¿no es posible que se interesen igual que nosotras? "Bueno, Quino es el creador de Mafalda y nadie diría que es un personaje para mujeres. Pero acabas sintiéndote que es así".
Igual que Moderna ha dado el paso y ha creado el personaje masculino que ha atraído a los hombres a su libro anterior, Santolaya baraja hacer lo mismo: "Igual si

saco hombres, logro que vayan hacia atrás y lean los anteriores que he hecho... Estoy pensando en hacer un personaje masculino".

Qué pena que por ser mujer y tratar un tema romántico a ellos les dé alergia

Relata Córcoles una anécdota que le parece especialmente ilustrativa del sexismo al que se enfrenta y no sólo como escritora de cómic: "Una vez en el Salón del Cómic, me senté a firmar y me vino un hombre a decirme: perdona es que este asiento es para autores.

¿Pensó que yo me había sentado a descansar de mis tacones? No se le había ni pasado por la cabeza que yo fuera autora".
¿Acaso la juventud?, ¿tal vez fue más por eso el equívoco? Lo duda Moderna de Pueblo: "No sé qué habría dicho si hubiera sido un hombre joven. Me habría gustado verlo".