Una monja da a luz sin saber que estaba embarazada

Miércoles, 11 de Junio, 2014

3 febrero 2014
Le ha llamado Francisco, en honor al Papa

Todo comenzó con unos fuertes dolores en el vientre. La hermana Roxana Rodríguez, originaria de El Salvador y de 32 años de edad, fue trasladada a urgencias del hospital San Camilo de Lellis, en Rieti, en ambulancia, y aquejada de fuertes dolores y gran malestar general. "No sabía que estaba embarazada. Sólo tenía un fuerte dolor de vientre", explicó la religiosa, según recogen los medios locales que citan fuentes del hospital donde dio a luz. El parto del niño, de tres kilos y medio, tuvo lugar cuando los servicios de urgencias recibieron el aviso de las monjas del convento de Discípulas de Jesús, que se encargan de un asilo de ancianos, que decidieron llamar al número de emergencias asustadas por los "fuertes dolores en el vientre" que su compañera aseguraba padecer.

Cuando los servicios sanitarios llegaron al convento de Rieti el resto de religiosas aseguraron estar convencidas de que se trataba de un "dolor estomacal" y afirmaron no estar al corriente de su estado de buena esperanza. "¿Pero cómo es posible? No podríamos imaginar algo como esto", aseguraron las monjas del convento italiano. Según los medios locales, la monja, que está recuperándose del parto, aseguró que va a ocuparse de su hijo y ya está recibiendo ropa y otros regalos para el bebé. Por su parte, sor Herminia, la madre superiora de las Discípulas de Jesús de Rieti, aseguró que la monja salvadoreña "ha hecho todo sola" y subrayó que el resto de religiosas del convento no se habían dado cuenta de nada. Al niño decidió llamarle Francisco, en honor al Papa “Estoy muy feliz. Me siento más una madre que una monja, creo que eso es obvio. Decidí llamarlo Francisco en honor de nuestro maravilloso Papa sudamericano. No me siento culpable. Voy a mantenerlo y criarlo”, explicó Rodríguez, quien hace pocos meses tuvo que regresar a su país para renovar su pasaporte.

Pese a que asegura desconocer que estuviera embarazada, el hecho le valió la expulsión de su convento. “No ha hecho mal a nadie pero nos ha mentido. Aquí no volverá, esto está claro. No ha sabido resistir a las tentaciones”, aseguró la madre superiora del Convento Discípulas de Jesús, Sor Herminia. No obstante, agregó que desde que regresó de su país natal a mediados del primer semestre del año pasado, su actitud era diferente. “Notamos que había engordado y que últimamente se comportaba de manera extraña. Tenía dolores de estómago y le disgustaban ciertos olores. Le hicimos incluso la broma de que pudiera estar embarazada y ella nos respondía muy enojada”, detalló la superiora. Sin embargo, Rodríguez asegura estar dispuesta a responder por su hijo, aunque teme la presión mediático y el rechazo de algunos sectores, no sólo en Italia, sino también en su país. “Es un regalo de Dios. Estoy un poco preocupada por toda la publicidad, no sólo en Italia, sino en El Salvador y en todo el mundo. Todo el mundo está hablando de esto y creo que no voy a ser capaz de regresar a mi país de origen, por no hablar de Rieti”, explicó la monja.

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