CUSTODIA PATERNA: Padres de nueva generación

lunes, 19 de marzo de 2012

Padres de nueva generación

Lunes, 19 de Marzo, 2012

Cuidan a los niños, cocinan y limpian, y cada día se involucran más en la educación de sus hijos; una tendencia en aumento que contrasta con épocas anteriores.
Encontrar a un padre de los que ahora son abuelos que cambiara los pañales al bebé o que hiciera la comida a los niños al salir del cole hace años era una tarea ardua, y si hablamos ya de planchar o explicar a la niña los cambios que trae la menstruación, la cosa se ponía realmente difícil. Ahora, en cambio, los padres van asumiendo poco a poco un rol similar al que hasta ahora era prácticamente exclusivo de la mujer en el cuidado de los hijos y en las tareas del hogar, o eso se desprende al menos de casos como los recogidos en estas páginas con motivo del Día del Padre. Dos separados con hijos, un padre primerizo y un amo de casa, son sólo cuatro ejemplos de la evolución que poco a poco va sufriendo una generación de padres que cada día son un poco más padres.
Uno de los ejemplos más significativos de esta evolución es el de René Bijllo, aunque en su caso el hecho de que su madre sea alemana facilitó una educación menos sexista que la que recibieron muchos españoles de su generación. René, de 47 años, vive en Benidorm con su mujer Eva y sus hijos Elías de 14 años y Sofía de 11. "De las tareas de la casa y de los niños me ocupo yo desde hace diez años", cuenta. "No fue algo accidental. Mi mujer y yo consideramos que es fundamental armonizar la vida familiar con la profesional, y creímos necesario que uno de los dos se dedicara a la familia. Como resultaba mucho más fácil para mí compatibilizar ambos aspectos que para ella que es abogada y trabaja en Alicante, opté por aprovechar las nuevas tecnologías para trabajar desde casa y hacerme cargo de la limpieza, la comida y los niños". René considera que, el suyo, "es sólo un modelo de los muchos modelos de familias que hay en la actualidad porque ésta es una época de adaptación y tránsito".
La jornada de René empieza temprano, sobre las seis y media, para preparar el desayuno a los niños. "Luego, mientras están en el colegio me dedico a las tareas de la casa o me meto en internet para atender el negocio. Si me aburro de planchar, me voy a internet, y así lo llevo todo". Él se encarga de limpiar, comprar y cocinar y, cuando vuelven los niños, "hablamos de la mañana, me ocupo de las quejas, de las peleíllas, lo normal". Al preguntarle si le gusta llevar la casa, responde que "a veces me cansa, como le ocurre a cualquiera sea hombre o mujer porque es un trabajo muy ingrato. Limpias, y al día siguiente ya está sucio otra vez. Mi mujer también se queja de lo contrario. Ella está viendo en primera persona lo que sufren muchos padres que tienen poco contacto con sus hijos y se quedan en un segundo plano". ¿Y cómo lo llevan Elías y Sofía? René asegura que "muy bien. Saben que no es un caso usual pero están acostumbrados y les gusta".
Más tradicional es la situación de Miguel Oliver, cartero de 37 años que hace dos meses tuvo un bebé. Su mujer, Sandra, está disfrutando de la baja por maternidad, lo que no impide a Miguel ocuparse cuando puede del niño. "Yo hago de todo, lo limpio, lo baño, juego con él, lo visto e intento dormirlo, pero echa mucho de menos a su madre cuando no está y a veces llora". Efectivamente, mientras hablamos, el bebé, que se llama Miguel como su padre, empieza a llorar hasta que lo coge en brazos e intenta calmarlo. "Da mucha guerra y mucho trabajo pero también muchísimas alegrías. Ves que crece y evoluciona, y cuando le hablas y te devuelve la sonrisa, entonces, pídeme lo que quieras", señala feliz. Miguel cree que "eso de que tener un hijo te limita la vida está muy mitificado. Organizándote puedes hacer de todo". Quien piense que las mujeres son más tiernas que los hombres con sus hijos debería escuchar a este hombre: "Me encanta estar con él. Cuando me lo pongo en el pecho para que oiga el corazón y se tranquilice, a veces se me duerme. No hay nada mejor".
Los hijos de Jose Carlos Baquedano, de 49 años, ya hace mucho que dejaron de ser bebés. Iker tiene 20 y Yaiza 15. Los dos viven con su padre que, después de separarse, consiguió la custodia "porque yo no podía conformarme con ver a mis hijos sólo cada dos fines de semana. Mi horario de trabajo es bueno, ellos ya eran mayorcitos cuando me separé y en el juicio dijeron que preferían vivir conmigo, pero van con su madre con frecuencia". Criar y educar a dos hijos no es fácil, pero él asegura estar "encantado de que vivan conmigo y de ocuparme de ellos aunque a veces es difícil". "Recuerdo al principio que en ocasiones me daban las tantas de la madrugada hablando con mi hijo que era entonces un adolescente". Jose Carlos se ríe al preguntarle si con dos hijos tan mayores en casa tiene vida privada. "Bueno, sí, sobre todo cuando están con su madre...".
También está separado Antonio García, de 42 años, aunque en este caso es la madre de su hija Paula la que tiene la custodia. La niña, de 7 años, va con su padre todos los jueves y de jueves a domingo cada dos fines de semana. "Cuando estoy con ella me apaño muy bien, le hago la comida, le preparo la ropa, la llevo al médico o me turno con mi ex para ir a las reuniones escolares". Antonio trabaja en Telefónica, "y si hay algún problema cambio turnos con algún compañero, su madre y yo nos llevamos bien, lo tenemos bien organizado y Paula está contenta". Antonio adora a la niña. "Me gusta hacer lo que ella más disfruta cuando estamos juntos que es salir al parque o ir a la playa, cosas sencillas. También le encanta pintar y no para de hacer dibujos para su madre y para mí".