«La pelea se nos fue de las manos, pero mi marido no es un maltratador»

Viernes, 25 de Julio, 2014

La esposa del hombre detenido por agredirla y poseer un arsenal de armas defiende su inocencia y dice que la documentación está en regla «para casi todas»

Acuden por una agresión a una mujer y se encuentran con un arsenal de armas

«Tuvimos una pelea muy fuerte, que se nos fue de las manos y encima estábamos delante de la comisaría, pero mi marido no es un maltratador ni me ha agredido». Así trataba de explicar ayer a LA VOZ DE AVILÉS el incidente del pasado domingo día 13 frente a la comisaría, en la calle Río San Martín, la mujer del hombre que fue puesto a disposición del Juzgado de Violencia de Género por agredirla en presencia de su hija y poseer, además, un arsenal de armas en casa, la mayoría de ellas sin licencia, según la nota oficial de la Policía.
La mujer del detenido aseguró que «se trata de una persona correctísima, a la que no han puesto ni una multa, yo no puse ninguna denuncia por maltrato ni hubo parte de lesiones por lo sucedido, tan sólo algún rasguño», propio de lo que ella llama «una pelea de pareja».
La mujer indicó que el problema surgió cuando la policía descubrió, en un primer cacheo, que su esposo portaba una pistola de calibre 9 milímetros que llevaba en una cintura oculta y le fue intervenida. «Se olvidó de dejarla en casa y la llevaba encima», recordó.

«El problema fue que se olvidó de dejar la pistola en casa y discutimos en el coche»

La Policía Nacional explicó posteriormente en la nota oficial que la pistola estaba manipulada e inutilizada, pero que tenía un nuevo cañón adaptado para ser utilizada y cargada con nueve cartuchos. Su esposa explicó ayer, al respecto, que «desde niño es un apasionado de la caza y tiene Licencia C (armas para vigilancia y guardería) y Licencia F de escopeta (armas para uso en campos, polígonos y galerías de tiro), además de un libro de coleccionista (para armas de fuego antiguas, históricas o artísticas)». Ha sido ella la que, desde su detención, se ha encargado de presentar la documentación «de todas las armas, la licencia y la guía de pertenencia». Según admitió la mujer, «están todas en regla salvo alguna cosa que no, que se solucionará con alguna multa», pero también lamentó que «mi marido está siendo prejuzgado y dicen que es un maltratador cuando sólo era una discusión de pareja».
En el arsenal que se encontró en un su casa también había una placa de policía falsificada, aunque su esposa restó importancia a este hecho porque «no la estaba utilizando, otra cosa hubiera sido eso, y únicamente la tenía porque la había comprado en el rastro».

La detención

El hombre -del que no ha trascendido su identidad- fue puesto a disposición judicial el domingo día 13 de madrugada, después de que la Policía comprobase que estaba golpeando a una mujer en el interior de un vehículo. Una dotación se dirigió rápidamente al lugar de los hechos, donde, efectivamente, pudo comprobar la veracidad de la llamada y ver cómo un hombre golpeaba a su mujer en presencia de su hija. El detenido confirmó que tenía armas en su domicilio, por lo que, tras la debida autorización judicial, se efectuaron varios registros en su casa. Fue así cómo se descubrió todo un arsenal de armas, tanto por su cantidad como por su variedad. Como consecuencia de los registros, se incautaron cuatro armas largas (dos rifles de modelo Franchi, un fusil y una escopeta de doble cañón, manipulada, con los cañones recortados), ocho pistolas, cuatro revólveres y más de 11.000 cartuchos de diversos calibres.
La Policía señalaba que el detenido disponía de licencia de alguna de las armas incautadas, pero su propia esposa confirmó que no de todas. El arsenal iba a ofrecer más sorpresas, porque además de la placa de policía falsa se le intervino un silenciador, dos pistolas eléctricas tipo Taser y diversas armas blancas como navajas automáticas, estiletes y también cuchillos de gran tamaño. El artículo 564 del Código Penal recoge que la tenencia de armas de fuego reglamentadas, careciendo de las licencias y permisos necesarios, puede ser castigada con penas de prisión de uno a dos años si se trata de armas cortas; y de seis meses a un año, en el caso de armas largas.

http://www.elcomercio.es/aviles/201407/24/pelea-manos-pero-marido-20140724001524-v.html