CUSTODIA PATERNA: Penas de hasta 10 años de cárcel para padres que no transmitan amor a sus hijos

jueves, 3 de abril de 2014

Penas de hasta 10 años de cárcel para padres que no transmitan amor a sus hijos

Jueves, 3 de Abril, 2014
REINO UNIDO
hoy cumple 16 días en huelga de hambre, sólo con agua: La terrible historia de un padre por su hijo. Manuel Ruiz en Es La Tarde de Huesca en su sexto día de huelga de hambre

El Gobierno británico prepara una modificación legislativa que sancionará a los progenitores que no abracen o besen a sus niños o los utilicen como chivos expiatorios

Un experimento británico demuestra lo poco dispuestos que estamos a ayudar a dos niñas pequeñas perdidas en un centro comercial
Los padres que priven a sus hijos de abrazos, besos, caricias y muestras de afecto podrán ser enjuiciados en Inglaterra y Gales por cometer un delito de “crueldad emocional”, según la nueva ley que está preparando el Gobierno británico y de la que se ha hecho eco el rotativo Daily Telegraph. Además, con la nueva ley los padres declarados culpables podrían enfrentarse a una pena de hasta diez años de cárcel, el plazo máximo que contempla la ley británica por casos de negligencia infantil.
Con el nuevo cambio, previsto para los próximos meses, se introducirán otros nuevos delitos como el hecho que se fuerce a un menor a presenciar acciones de violencia doméstica, utilizar a un niño de chivo expiatorio o forzar castigos. La nueva ley también dará poder a la policía para intervenir de manera precoz ante un caso de abusos físicos a menores.
La propuesta de ley, bautizada como Cinderella (Cenicienta) ha generado mucho debate y fuentes gubernamentales han recordado que la crueldad infantil es un “odioso crimen” que debe ser castigado. "Necesitamos una definición clara, concisa y viable del maltrato infantil”, han asegurado, al mismo tiempo que el Ministerio de Justicia británico ha confirmado que está "estudiando" cómo cambiar la ley para proteger a los niños de este tipo de daño. Por su parte, el portavoz del primer ministro David Cameron ha constatado que existe “preocupación” sobre este tema y que una de las cuestiones planteadas por organizaciones que tienen experiencia en este ámbito es que “la ley no ha sido actualizado desde hace tiempo”.
Esta propuesta, que tendrá que ser llevada al Parlamento, se produce tras una campaña iniciada en abril de 2012 por la organización no gubernamental Action for Children, que se dedica a prestar apoyo a aquellos niños y adolescentes más vulnerables de la sociedad. Tras conocerse la noticia, Tony Hawkhead, director de la asociación, dijo que el cambio en la ley será un "paso adelante monumental para miles de niños" que se encuentran en una situación de abandono, 1,5 millones de menores británicos según los datos oficiales. Action for Children ha denunciado que entre 200 y 300 niños han sufrido casos de negligencia en el Reino Unido, pero sus responsables no han sido llevados ante los tribunales.
Por su parte, el diputado conservador Robert Buckland ha apoyado el cambio de la ley y ha dicho que la legislación actual “está anticuada, ya que se basa en gran medida en las cuestiones introducidas por primera vez hace 150 años”, que sólo permite que un adulto responsable de un niño sea procesado si ha asaltado intencionadamente, abandonado o expuesto a un niño a sufrimientos o heridas. "He conocido a niños que han sido chivos expiatorios en sus familias y constantemente humillados”, ha añadido.
La actual Ley de la Infancia y la Adolescencia de Inglaterra y Gales (Children and Young Persons Act) data de 1933 y prevé el castigo de una persona que trata a un niño "de un modo que pueda causarle sufrimientos innecesarios o daños a la salud (incluidos los daños o la pérdida de la vista o el oído, o una extremidad u órgano del cuerpo, y cualquier trastorno mental)".
Los responsables del Gobierno británico quieren introducir la medida, que se añadiría a la ley actual, antes de la próximas elecciones. Según varias fuentes, posiblemente se pueda dar a conocer en el tradicional discurso de la Reina Ibsael II en el Parlamento británico el próximo mes de junio. ”No puedo hacer ningún comentario sobre lo que puede o no estar en el discurso de la Reina pero sin duda es algo que está bajo una alta consideración”, ha declarado el portavoz del primer ministro británico, David Cameron.