Padre de verano

Miercoles, 8 de Julio, 2015

Con total normalidad se trata el hecho de que el padre asuma la guarda y custodia de los hjos en verano. Una guarda y custodia que se ha negado por considerar más apta a la madre para la crianza de los hijos.

Alguién podría hacerse la pregunta del motivo por el cual al padre sí se le permite en el verano custodiar a sus hijos, es decir, ejercer las responsabilidades y obligaciones que conlleva la custodia de los menores. Pero esta pregunta se la formulará quien se encuentra distanciado del tema en concreto, por suerte, porque quienes se hallan inmersos en estos procesos conocen bien que los periodos vacacionales en los cuales se concede la custodia compartida no son otra cosa más que un descanso para la madre. Ésto es que, si la madre durante estos periodos estivales tuviera que permanecer también  con los niños los 26 días al mes, ella no tendría vacaciones. Es decir, hablando en plata, quien realmente disfruta de las vacaciones seguro, es la madre, quien  además recibe la pensión de alimentos integra, y además también ocupa ese domicilio familiar que deberá abonar como los gastos el padre de los menores, y a pesar de que dicho domicilio pueda quedar tan vacio como la boca de esos menores que habrá de alimentar la madre cuanto estén con el padre.
Se ampara en unos motivos el hecho de que el progenitor no custodio pague la pensión en el mes de verano aunque además haya de mantener a los niños con él y procurarle alimento también, y puede tener su lógica. Pero lo que no mantiene lógica alguna es que el interés del menor pueda verse afectado en los periodos de vacaciones porque la madre haya de descansar.

Para los hombres, dependiendo de la edad de los menores, podrá representar un mayor o menor problema el tener a sus hijos estos días, pues no olvidemos que estos hijos están acostumbrados a unas pautas que reciben de la madre, y ahora les meten con un visitarnte durante un mes o más.

El hecho de que el padre tenga o no pareja se refleja en el artículo como algo que ha de ser tenido en cuenta, pues los menores por supuesto que son sensibles a su atención plena, pero sin embargo, el hecho de que la madre meta en casa a los novios venideros tras la separación del padre es algo que se considera muy normal, y es que como siempre desde una óptica muy machista y feminista, se analizan las cuestiones referidas al divorcio siempre a favor de la mujer.

Por apuntar también que el verano suele ser también una época en donde más abundan las sustracciones parentales, la mayoría por parte de la madre.

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Fuente:
“En busca de un destino que les atraiga”
 http://cadenaser.com/programa/2015/07/07/hoy_por_hoy/1436276970_811947.html