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lunes, 7 de diciembre de 2015

Un marido o una esposa son sustituibles, los hijos nunca

Lunes, 7 de Diciembre, 2015

Si eres una de esas personas que aún llevando una vida aparentemente normal, llevas por dentro una pena incontenible, es probable que hayas llorado, hombre o mujer, porque los hombres también lloran, y no solo los homosexuales.



Este hombre, es un gran ejemplo de superación, es justo todo lo contrario a aquellas personas que viven quejándose y amparándose en la superioridad de otros para justificar el no hacer o conseguir alguna meta.
No solo son estas personas, mujeres, esas feministas que piden ventajas auto considerándose víctimas en un mundo de hombres, o esos varones que intentan justificar el alejarse de sus hijos, el no luchar por ellos o el ceder la custodia a cambio de un acuerdo. Todos los que estamos aquí somos personas, hombres o mujeres, unos más débiles y otros más fuertes, pero la fortaleza no la proporciona el estado físico, es la mente quien consigue que rompas y superes barreras que en un momento dado resultan infranqueables.

Cristian ha contado con algo muy importante en su vida, ha contado con el apoyo de su padre y de su madre, de su familia. El mismo cita que no vale la excusa para dejar de vivir tras haber perdido a tu marido o a tu mujer, la vida sigue. Es admirable ver este ejemplo de superación, pues es cierto que muchas hombres y mujeres deciden no seguir viviendo porque las circunstancias de la vida en un momento dado se vuelcan contra ellos de tal forma que pierden la ilusión por vivir.

La pérdida de un ser querido y el divorcio, son los dos factores que son considerados de mayor riesgo para que una persona decida que su vida carezca de sentido. En algunos casos ambas guardan relación. La separación para las personas que se unieron por amor, bajo un sentimiento de compartir sus vidas y entregarse ambos de por vida, supone un gran "palo", pues es muy distinto perder a un ser querido en un accidente o por muerte natural (aún suponiendo un gran dolor), que por ejemplo por una traición, pero en las relaciones siempre existe un riesgo, y más en la sociedad actual  en donde se enseña a ser feliz uno mismo por encima de todo.

Los divorcios y separaciones se llevan por delante la vida de muchos varones, muchos más que mujeres, se triplica la cifra, pero es que es muy diferente el divorcio para una mujer que para un hombre, o mejor dicho, para una madre que para un padre. El padre es separado al mismo tiempo de sus hijos, y condenada a ver en la mayor parte de los casos, a sus hijos crecer sin el amparo de su protección. A los hombres les enseñaron a dar la vida por la familia. Son ellos quienes iban a las guerras, y no iban por gusto, sino por defender y proteger a su familia, apartarles de la vida de sus hijos es un dolor que es indescriptible, pues no es solo enfrentarse a dos domingos por la tarde cuando en la entrega (como si fuera una mercancía) de los menores, éstos se aferran a su cuello con sus bracitos cuando intuyen que tras esa despedida quedan dos duras semanas en las cuales echarán de menos su juguete preferido, es que conforme va pasando el tiempo, el padre es condenada a ver como su hijo va creciendo y él como padre se encuentra anulado para poder ayudar a sus hijos en los problemas diarios de la vida. El fracaso escolar es achacado a los hijos de padres separados, y los centros de internamiento de menores se encuentran plagados de hijos de padres separados, pero estos hijos son hijos de padres separados, sí, pero bajo que se han criado bajo la custodia materna. Y no es culpar a la madre, ella se acoge a las ventajas que le ofrece el sistema legal.

Vivir sintiendo que como padre estás incapacita para proteger a tus hijos, es una tortura, en la que se aprende que por muy dura que pueda ser la muerte, siempre supondrá el alivio de ese día a día de sufrimiento permanente. Pero  a pesar de todo, y con todo ese sufrimiento, hay que mirar adelante, mientras tus hijos vivan podrán necesitarte, y si está ahí, un día puede que puedas ayudarle. La vida podría ser mejor, como lo es para otras personas que hay a tu alrededor, pero la vida de Cristian también podría haber sido como la de otras personas y sin embargo no se amedrante. Él tiene la suerte de disponer de un padre y una madre que le apoyaron , que fuera como fuera para ellos era lo más importante en sus vidas. Nuestros hijos no son los culpables de vivir huérfanos de padre vivo, ni siquiera de despreciar a sus padres. Ellos están envenenados por un sistema judicial y unas políticas de género, y muchas veces por desgracia también por sus propias madres, pero lo mismo que podrían estarlo por sus padres.

Hay que mantenerse en pie, sino con la fuerza de Cristian, como se pueda, pero mientras ellos estén ahí, en algún momento pueden necesitarte. Cristian tiene unas diferencias con respecto a muchos otros hijos, y tuvo a sus padres ahí pese a todo, seguro que para ellos fue duro. Por muy duro que sea para un padre vivir alejado de sus hijos, levantarse día a día viendo con el miedo de ver que sus hijos no van por el buen camino, ha de mantenerse con fuerza, el día menos pensado las cosas pueden cambiar, y si él está presente podrá ayudarles. Los padres de Cristian seguramente al principio no pensaron ver a su hijo así, pero la esperanza, y sobre todo el amor incondicional a su hijo les ayudo. Si alguna vez tienes la idea de desaparecer, piensa que para ti es lo mejor que te podría pasar, pero serás un cobarde, pues abandonarás a tus hijos de una vez por todas. Nadie puede garantizarte que puedan reclamar tu ayuda un día, ni siquiera que tu puedas ofrecersela, pero al padre y a la madre de Cristian tampoco nadie pudo garantizárselo, y no por ello desistieron.

Puedes elegir terminar con tu dolor y abandonar a tus hijos, pero también puedes elegir superarte a ti mismo, y al menos mantenerte en pie, al menos intentarlo con todas tus fuerzas. Los hijos para un padre nunca pueden sustituirse, ni siquiera con otros. pero piensa que tus hijos si que jamás podrán tener otro padre, tú les distes la vida.

Fuente:
"El Vegetal" - La historia de Cristian Mariano Deppeler
Tere Fuentes Martín
https://www.youtube.com/watch?v=Y9ts5Qf5RFA

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