El número de divorcios crece por primera vez desde el inicio de la crisis, pero solo en el 7% de los casos los hijos quedan a cargo de ambos padres
20.09.11 - NURIA TRIGUERO | MÁLAGA
20.09.11 - NURIA TRIGUERO | MÁLAGA
Manifestación de padres divorciados y separados a favor de la custodia compartida
Entre los innumerables hechos que demuestran el imparable avance de la sociedad hacia la igualdad de sexos hay también excepciones. Y una de las que permanece más enquistada es la relacionada con la custodia de los hijos tras las rupturas matrimoniales. El cuidado de los vástagos sigue siendo cosa de mujeres; así lo reflejan las estadísticas año tras año. Y pese a las numerosas reivindicaciones de un cambio de ley que favorezca la extensión de la custodia compartida, lo cierto es que ésta sigue siendo una opción minoritaria. De hecho, en lugar de ir ganando terreno ha ido retrocediendo en los últimos años.
Las estadísticas no mienten. El año pasado, solo 313 de las parejas que firmaron su divorcio en Málaga compartieron la custodia, lo que representa el 7,5% del total de rupturas con hijos menores de por medio. Ello supone una fuerte regresión, ya que en 2009 el porcentaje de matrimonios que accedieron a un régimen de corresponsabilidad sobre sus vástagos fue del 15,6%, es decir, el doble que el año pasado. En el caso de las separaciones, el retroceso de la custodia compartida ha sido aún más notable: de concederse en el 23% de los casos a apenas en el 7%, según el Instituto Nacional de Estadística.
Aún más raro es que el juez se decante por el padre para conceder la custodia. Esto solo ocurrió en 104 ocasiones el año pasado en la provincia, es decir, el 5% de los divorcios con hijos. En cambio, las madres se quedaron a cargo de los vástagos en el 87% de los casos.
De nuevo al alza
En Málaga se rompieron 4.148 matrimonios entre personas de distinto sexo el año pasado (no hay estadísticas provinciales de rupturas homosexuales). La fórmula más utilizada para canalizar estas disoluciones fue el divorcio, con 3.871 casos; seguido de la separación, con 269; y la nulidad, con solo 8. El año 2010 representó un cambio de tendencia: las disoluciones de parejas volvieron a aumentar -concretamente un 7,2%, casi el doble que la media nacional- después de tres años de suave disminución que ha estado achacada a la crisis económica, ya que muchos matrimonios han renunciado a oficializar su ruptura por no poder asumir los gastos.
Según la estadística del INE, la provincia de Málaga ostenta una de las tasas de ruptura matrimonial más altas del país, con 2,58 casos por cada 1.000 habitante. La media nacional está en 2,35 y la andaluza, en 2,38. Seis de cada diez parejas casadas que decidieron poner punto y final a su convivencia el año pasado en la provincia tenían hijos a su cargo.
Más de la mitad de los divorcios (el 55%) se producen después de diez años o más de matrimonio y solo en el 10% de los casos existe una separación previa. Y es que desde la instauración de la llamada 'ley del divorcio exprés' en 2005, que permite una disolución del matrimonio más directa y rápida, sin causas y sin tener que pasar por el trámite previo de la separación, el divorcio se ha convertido en la fórmula preferida para canalizar las rupturas. En el 65% de los casos, además, se produce de mutuo acuerdo.
Mientras, la opción de la separación es cada vez más minoritaria y parece estar quedando reservada a las parejas más veteranas: casi el 60% se firman entre matrimonios con más de 15 años de vida en común.
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