14/09/2011
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- Una mujer detenida por la muerte de su hijo menor de edad
Así lo expresaron desde el Camm, y coincidieron la Dirección de la Mujer, la Red de periodistas PAR y espacios políticos. “Es el resultado de una historia no atendida eficientemente por el Estado”, sumó Alba Salinas, del Centro de Apoyo a la Mujer Maltratada
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No es violencia pasional, ni sentimental, ni genética, ni natural. Desde distintas agrupaciones políticas y organizaciones que trabajan por los derechos de las mujeres, aseguran que la violencia de género es la máxima expresión del poder que los varones ejercen sobre las mujeres. El femicidio es su máxima expresión. La muerte de Marcela Barraza conmocionó a los vecinos del barrio Las Heras y a la ciudad, y la lectura de los hechos arroja algunos datos que alimentan la definición de femicidio como el asesinato de la mujer por el solo hecho de ser mujer.
“Ella no va a trabajar más ahí, la voy a mantener yo”, habría dicho el femicida al responder el llamado del empleo de Marcela el jueves que ella desapareció y no asistió a la planta donde fileteaba. La dependencia económica muchas veces es signo de apropiación de la mujer.
Otro indicador del discurso machista está graficado en el mensaje que él mismo escribió a la hija para despistar a los investigadores que ya estaban buscándola: “Quedate tranquila, yo voy a volver en unos días. Me fui a Balcarce con un hombre de 50 años”.
EL DISCURSO MEDIÁTICO
Hubo medios que enmarcaron el femicidio como “un cóctel de locura y amor” o un “hecho pasional”. En un crimen semejante nunca podría mediar el amor. “Más allá de no conocer las cuestiones concretas de este caso, un femicidio nada tiene que ver con un crimen pasional ni con un acto de amor. Sino que es el resultado de una historia no atendida eficientemente por el Estado. Desde los medios debe dejarse de señalar a los femicidios como un ‘cóctel de locura y amor’”, sostuvo Alba Salinas, quien integra el Centro de Apoyo a la Mujer Maltratada (Camm). “No la mató porque la quería, sino por una cuestión de dominación machista”, sumó Alejandra Patuto, directora de la Mujer de la Municipalidad.
Marcela Gabioud, comunicadora social e integrante de la Red PAR –una red de periodistas por una comunicación no sexista- reparó en la forma en que los medios deberían abordar la noticia porque –dijo- “impacta en la vida de las mujeres”.
Señaló también que la muerte de Marcela Barraza, de 35 años, a manos de su expareja, Eduardo Orbes, implicó que él creyera “que era de su propiedad”. A su vez solicitó que el Estado lleve adelante una política de género preventiva para evitar este tipo de desenlaces. “No es un hecho aislado: son mujeres muertas por violencia machista”, subrayó.
Y reparó que cuando se habla de inseguridad, es necesario ver que a veces la agresión no está fuera, sino bajo el mismo techo. “Mucho de se habla de la inseguridad por la falta de accionar policial, cuando las mujeres podemos correr más riesgo en nuestras casas”, apuntó.
POLÍTICA PÚBLICA DE GÉNERO
Salinas planteó que aquellas mujeres que sufren maltratos por parte de sus parejas y deciden separarse, deben tomar algunos recaudos al momento del corte para protegerse. Para ello, pueden recibir asistencia en el Camm o la Dirección de la Mujer, hacer la denuncia por amenazas en la Comisaría de la Mujer e incluso pedir una restricción de acercamiento en el Tribunal de Familia.
“Hace años que nuestra ciudad viene siendo protagonista en la nómina de los femicidios más resonantes del país. Sabemos que el femicidio es el corolario de un círculo de violencia que va en aumento y que muchas veces no se puede cortar porque las mujeres se encuentran desamparadas cuando acuden a buscar una respuesta del Estado”, comentó Victoria Vuoto, candidata a concejala por el Frente Amplio Progresista, quien presentó meses atrás un proyecto de ordenanza para revalorizar la política pública de género.
En esta línea, la joven abogada referente del Movimiento Libres del Sur en Mar del Plata agregó: “Según los últimos datos que conocemos, los femicidios han aumentado un 20 por ciento respecto del año anterior. Cada 28 horas muere una mujer en manos de sus parejas o exparejas. La crueldad de las cifras nos habla de que debemos tomar cartas en el asunto con políticas integrales de manera urgente”.
A ello Salinas sumó: “La idea no es contar la cantidad de mujeres muertas. En la medida que el Estado no adopte políticas públicas a corto, mediano y largo plazo para erradicar la violencia de género, esto seguirá sucediendo”.
ESTADÍSTICAS
Según los últimos datos conocidos, cerca de medio centenar de denuncias se realizan por día en la Comisaría de la Mujer y se estima que casi el 70 por ciento de los llamados al 911 tienen que ver con violencia de género. Al Camm, cada día de guardia, acuden cuatro mujeres en busca de respaldo. La referente del Centro de Apoyo a la Mujer Maltratada cuestionó la falta de estadísticas oficiales como “una dificultad para el diseño de políticas de prevención y asistencia”.
Patuto, por su lado, señaló que se busca avanzar en ese sentido: elaborar una planilla con tomas de denuncias y derivaciones que permitan una estadística “lo más fiel posible” entre Provincia, Municipio, el Hospital Interzonal, Tribunales y la Comisaría de la Mujer.
A su vez, la titular de área de la Mujer planteó que se viene trabajando en los barrios a través del programa Acercar y de reuniones que se organizan en distintos puntos. Para la labor que vienen desarrollando y la posibilidad de ampliarla, Patuto reparó en la importancia de articular y sumar más partidas presupuestarias. “La ciudad se complejiza cada vez más. Y sabemos que cuanto más jerarquía tenga un área, no sólo tiene una mayor partida, sino también autonomía para evitar cuestiones burocráticas”, explicó.
En este sentido, Salinas contempló: “Si se trata de una dirección, una secretaría o una comisión es sólo una cuestión formal. Debe existir una política pública clara. Violencia y discriminación hacia las mujeres son dos conceptos en permanente relación y que atraviesan todo ámbito. Y debe haber destinado un presupuesto para sustentar esta política en forma permanente”.
Enseguida contempló que la ciudad es grande y que las mujeres de los barrios más carenciados, “no siempre llegan hasta la dirección o la comisaría de la Mujer”.
“La política –planteó- debe ser integral, descentralizada y transversal”. “Los recursos que hoy se destinan a la política de género son insuficientes, tanto en Nación, Provincia y Municipio”, cerró.
En perspectiva
A Marcela Barraza la mató su expareja porque la quiso suya, porque creyó que era de su propiedad. Ella le puso fin a la relación e importa saber por qué. Posiblemente pudo ser la necesidad de romper con un círculo de violencia que la tenía cautiva. No puede justificarse el crimen en un rapto de locura, en un amor desconsolado, porque sería obviar la violencia sexista que existe y que es necesario erradicar con políticas activas.
DÓNDE ACUDIR
En Mar del Plata existen asesoramientos, grupos de ayuda y centros de contención para asistir a las víctimas.
- Dirección de la Mujer: de lunes a viernes de 8 a 16 en Teodoro Bronzini 1147, casi Balcarce.
- Línea Malva (108): número de recepción de consultas telefónicas. Es anónimo y gratuito. Es atendida por profesionales capacitados que orientan, asesoran y articulan con los demás espacios de contención.
- Centro de Atención a la Mujer Maltratada (Camm): lunes, miércoles y viernes de 14.30 a 17 en Larrea esquina Salta. 472-0524. Pueden comunicarse vía mail a cammmdq@hotmail.com.
- Comisaría de la Mujer: las 24 horas en Independencia 2447, 2º piso.
- Centro de Ayuda a la Familia en Riesgo (CAFER): lunes a viernes de 9 a 19 en Bolívar 4252. 475-9485.
“Ella no va a trabajar más ahí, la voy a mantener yo”, habría dicho el femicida al responder el llamado del empleo de Marcela el jueves que ella desapareció y no asistió a la planta donde fileteaba. La dependencia económica muchas veces es signo de apropiación de la mujer.
Otro indicador del discurso machista está graficado en el mensaje que él mismo escribió a la hija para despistar a los investigadores que ya estaban buscándola: “Quedate tranquila, yo voy a volver en unos días. Me fui a Balcarce con un hombre de 50 años”.
EL DISCURSO MEDIÁTICO
Hubo medios que enmarcaron el femicidio como “un cóctel de locura y amor” o un “hecho pasional”. En un crimen semejante nunca podría mediar el amor. “Más allá de no conocer las cuestiones concretas de este caso, un femicidio nada tiene que ver con un crimen pasional ni con un acto de amor. Sino que es el resultado de una historia no atendida eficientemente por el Estado. Desde los medios debe dejarse de señalar a los femicidios como un ‘cóctel de locura y amor’”, sostuvo Alba Salinas, quien integra el Centro de Apoyo a la Mujer Maltratada (Camm). “No la mató porque la quería, sino por una cuestión de dominación machista”, sumó Alejandra Patuto, directora de la Mujer de la Municipalidad.
Marcela Gabioud, comunicadora social e integrante de la Red PAR –una red de periodistas por una comunicación no sexista- reparó en la forma en que los medios deberían abordar la noticia porque –dijo- “impacta en la vida de las mujeres”.
Señaló también que la muerte de Marcela Barraza, de 35 años, a manos de su expareja, Eduardo Orbes, implicó que él creyera “que era de su propiedad”. A su vez solicitó que el Estado lleve adelante una política de género preventiva para evitar este tipo de desenlaces. “No es un hecho aislado: son mujeres muertas por violencia machista”, subrayó.
Y reparó que cuando se habla de inseguridad, es necesario ver que a veces la agresión no está fuera, sino bajo el mismo techo. “Mucho de se habla de la inseguridad por la falta de accionar policial, cuando las mujeres podemos correr más riesgo en nuestras casas”, apuntó.
POLÍTICA PÚBLICA DE GÉNERO
Salinas planteó que aquellas mujeres que sufren maltratos por parte de sus parejas y deciden separarse, deben tomar algunos recaudos al momento del corte para protegerse. Para ello, pueden recibir asistencia en el Camm o la Dirección de la Mujer, hacer la denuncia por amenazas en la Comisaría de la Mujer e incluso pedir una restricción de acercamiento en el Tribunal de Familia.
“Hace años que nuestra ciudad viene siendo protagonista en la nómina de los femicidios más resonantes del país. Sabemos que el femicidio es el corolario de un círculo de violencia que va en aumento y que muchas veces no se puede cortar porque las mujeres se encuentran desamparadas cuando acuden a buscar una respuesta del Estado”, comentó Victoria Vuoto, candidata a concejala por el Frente Amplio Progresista, quien presentó meses atrás un proyecto de ordenanza para revalorizar la política pública de género.
En esta línea, la joven abogada referente del Movimiento Libres del Sur en Mar del Plata agregó: “Según los últimos datos que conocemos, los femicidios han aumentado un 20 por ciento respecto del año anterior. Cada 28 horas muere una mujer en manos de sus parejas o exparejas. La crueldad de las cifras nos habla de que debemos tomar cartas en el asunto con políticas integrales de manera urgente”.
A ello Salinas sumó: “La idea no es contar la cantidad de mujeres muertas. En la medida que el Estado no adopte políticas públicas a corto, mediano y largo plazo para erradicar la violencia de género, esto seguirá sucediendo”.
ESTADÍSTICAS
Según los últimos datos conocidos, cerca de medio centenar de denuncias se realizan por día en la Comisaría de la Mujer y se estima que casi el 70 por ciento de los llamados al 911 tienen que ver con violencia de género. Al Camm, cada día de guardia, acuden cuatro mujeres en busca de respaldo. La referente del Centro de Apoyo a la Mujer Maltratada cuestionó la falta de estadísticas oficiales como “una dificultad para el diseño de políticas de prevención y asistencia”.
Patuto, por su lado, señaló que se busca avanzar en ese sentido: elaborar una planilla con tomas de denuncias y derivaciones que permitan una estadística “lo más fiel posible” entre Provincia, Municipio, el Hospital Interzonal, Tribunales y la Comisaría de la Mujer.
A su vez, la titular de área de la Mujer planteó que se viene trabajando en los barrios a través del programa Acercar y de reuniones que se organizan en distintos puntos. Para la labor que vienen desarrollando y la posibilidad de ampliarla, Patuto reparó en la importancia de articular y sumar más partidas presupuestarias. “La ciudad se complejiza cada vez más. Y sabemos que cuanto más jerarquía tenga un área, no sólo tiene una mayor partida, sino también autonomía para evitar cuestiones burocráticas”, explicó.
En este sentido, Salinas contempló: “Si se trata de una dirección, una secretaría o una comisión es sólo una cuestión formal. Debe existir una política pública clara. Violencia y discriminación hacia las mujeres son dos conceptos en permanente relación y que atraviesan todo ámbito. Y debe haber destinado un presupuesto para sustentar esta política en forma permanente”.
Enseguida contempló que la ciudad es grande y que las mujeres de los barrios más carenciados, “no siempre llegan hasta la dirección o la comisaría de la Mujer”.
“La política –planteó- debe ser integral, descentralizada y transversal”. “Los recursos que hoy se destinan a la política de género son insuficientes, tanto en Nación, Provincia y Municipio”, cerró.
En perspectiva
A Marcela Barraza la mató su expareja porque la quiso suya, porque creyó que era de su propiedad. Ella le puso fin a la relación e importa saber por qué. Posiblemente pudo ser la necesidad de romper con un círculo de violencia que la tenía cautiva. No puede justificarse el crimen en un rapto de locura, en un amor desconsolado, porque sería obviar la violencia sexista que existe y que es necesario erradicar con políticas activas.
DÓNDE ACUDIR
En Mar del Plata existen asesoramientos, grupos de ayuda y centros de contención para asistir a las víctimas.
- Dirección de la Mujer: de lunes a viernes de 8 a 16 en Teodoro Bronzini 1147, casi Balcarce.
- Línea Malva (108): número de recepción de consultas telefónicas. Es anónimo y gratuito. Es atendida por profesionales capacitados que orientan, asesoran y articulan con los demás espacios de contención.
- Centro de Atención a la Mujer Maltratada (Camm): lunes, miércoles y viernes de 14.30 a 17 en Larrea esquina Salta. 472-0524. Pueden comunicarse vía mail a cammmdq@hotmail.com.
- Comisaría de la Mujer: las 24 horas en Independencia 2447, 2º piso.
- Centro de Ayuda a la Familia en Riesgo (CAFER): lunes a viernes de 9 a 19 en Bolívar 4252. 475-9485.
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