Reunión de los lunes

Nos reunimos todos los lunes a las 20,30 horas en la C/Vinaroz nº31, entrada por C/Pradillo, MADRID ¡TE ESPERAMOS!

lunes, 17 de junio de 2013

Se divorcian ellas

Lunes, 17 de Junio, 2013
Rafael Vargas
Varias divorciadas con estudios superiores me dieron su razón de lo que pasa y fue sorprendentemente la misma: «Somos complicadas». Lo que pasaba es que quien más se divorcia son ellas, asunto de enjundia para afectados y toda la sociedad como para dejarlo en presuntas complejidades. Dado que aducir la complicación de género con pretensiones de argumento no disipa la cuestión, vayamos a los números. Con el divorcio zapaterista sin necesidad de motivos, en España en 2011 la esposa presentó 63 demandas de divorcio por cada 37 el esposo. En Baleares (el INE no da datos de Ibiza) 62 por cada 38. Tampoco existe igualdad de género en el divorcio para pagar: en el 88% de divorcios de Baleares el esposo paga la pensión compensatoria. Que una mujer viva a costa de un hombre al que ha abandonado sin causa justificada debe ser un desdoro para el feminismo, lo es para la igualdad de derechos que se estila y se parece a una vuelta a la esclavitud.
La tendencia es general en occidente: dos tercios de divorcios los inicia la esposa. Y se acentúa con el nivel de estudios: en USA un pasmoso 90% de divorcios no consensuados los inicia la mujer cuando tiene estudios universitarios. Lo que es complicado objetivamente es la vida de las víctimas del divorcio, los hijos. Se diluyó el estigma del divorcio pero no sus secuelas nocivas sobre hijos de familias divorciadas. Un montón de estudios concreta tales complicaciones. Esos niños es más probable que fumen que los hijos de padres casados y que al llegar a adultos mantengan el hábito. Están más predispuestos a ser tratados por Trastorno con Déficit de Atención con Hiperactividad, como consecuencia del estrés vivido a causa del divorcio. A menudo van más retrasados que sus compañeros de escuela en Matemáticas y en aprendizaje de hábitos sociales. Son más susceptibles a enfermar, tendencia que aún se acentúa pasados cuatro años del divorcio. Tienen una mayor probabilidad de fracaso escolar y de abandonar los estudios, que aumenta si el divorcio les afecta a edad más joven o se sigue de un nuevo matrimonio. Son más propensos a la delincuencia y a pensar en el suicidio. Padecen más riesgo de hemorragia cerebral cuando adultos. Tienen más probabilidad de divorciarse, de casarse muy jóvenes y de hacerlo con hijos de parejas divorciadas: el estudio Wolfinger sugiere que si uno de los esposos es hijo de padres divorciados, la pareja tiene el doble de posibilidades de divorciarse; si ambos sufrieron la experiencia del divorcio como niños, la posibilidad se triplica. Y para acabar se mueren antes, cinco años menos de vida media que los hijos de no divorciados: por el bajón en la calidad de vida que para los niños suele suponer un divorcio y porque, sobre todo los hombres, mueren más por accidente y causa violenta.
No es justa la ley que, sin causa razonable, permite exponer a un hijo a esas consecuencias.
http://www.diariodeibiza.es/opinion/2013/06/17/divorcian/627110.html

No hay comentarios: