Manuel Rieina ha acudido hoy de nuevo a los juzgados de Dos Hermanas en señal de protesta por una sentencia que impide a sus hijas aún más el contacto y la relación con su padre.
Durante 3 años aceptó las imposiciones de la madre tras la separación. Se relacionó con sus hijas esos miserables y cicateros 4 días al mes que los jueces imponen como estándar en sus sentencias para crear, desarrollar o mantener el vínculo paterno-filial, más otros 4 días més repartidos en los miércoles de cada semana, donde Manuel recogía a sus dos hijas a la salida del colegio, y las entregaba en el mismo centro escolar a la mañana siguiente, el jueves,
Ahora los miércoles se han convertido en un día de visitas para sus hijas, que como unas presas que acceden a la condena de tercer grado, pueden permanecer con su padre solo unas horas las tardes del miércoles, y tendrán que volver a una hora concreta de nuevo al domicilio familiar, adscrito a la madre para cenar y acostarse.
Hoy Manuel ha hecho un parón en su huelga de hambre para cumplir con su obligación, aunque dichas obligaciones sean consideradas injustas. Ha acudido a recoger a sus hijas, ha pasado la tarde con ellas, y de después las ha dejado de nuevo en la caso de su madre.
- Un padre inicia una huelga de hambre frente a los juzgados de Dos Hermanas (Sevilla)
Fuente:
Whastsapp de Manuel Reina
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