Condenados por pagar a una mujer para fingir una agresión sexual

Sábado, 22 de Junio, 2013

Los inculpados deberán indemnizar a la víctima por daños morales

Los dueños de una autoescuela de la ciudad, María Ángeles Filgueira Méndez y Antonio

Ramón Rey Iglesias, fueron condenados por el Juzgado Penal 2 a 24 meses de multa cada uno, el máximo previsto en el Código Penal para los delitos de denuncia falsa, con una cuota diaria de ocho euros. La misma pena, pero con un cuota inferior -tres euros - que deberá abonar Rosa María Prieto, la persona a los que los dos primeros contrataron para que denunciara falsamente un abuso sexual a cambio de 500 euros y unos muebles.
María Ángeles Filgueira, su marido Antonio Ramón Rey y Rosa María Prieto, el día del juicio
Asimismo, los tres deberán indemnizar solidariamente a la víctima -un empleado de la autoescuela- en 17.558 euros por los días de incapacidad (sufrió una depresión) y los daños morales ocasionados.
R.A.M. había sido detenido e imputado en una agresión sexual el 16 de noviembre de 2009 ya que Rosa María Prieto aseguraba que le había realizado tocamientos en zonas íntimas cuando se disponía a tomar una clase práctica. En abril de 2010, confesó ante la policía que todo había sido mentira, pero cuando ya había datos en su contra.
La jueza Susana Pazos cree la versión de la mujer a la que propusieron el trato, 'ofreciendo todo lujo de detalles', y no a los otros dos inculpados, que negaron haberle propuesto el plan. Y ello porque, según recoge el fallo, 'el material probatorio permite acreditar que fue el matrimonio el que ideó y convenció a Rosa María para que formalizara una denuncia falsa contra R.A.M.'.
El móvil, según sostiene la magistrada, se asentaba 'en las importantes diferencias a nivel laboral' ya que intentaron venderle la autoescuela pero no llegaron a un acuerdo. Sin olvidar que en la fecha de los hechos se le adeudaban varios salarios.
a sentencia tiene en cuenta que los empresarios realizaron a la coacusada varios regalos 'para recompensarla por haber formulado la denuncia falsa'. Así, la ponente repara en una contradicción: 'Sostienen que no creyeron nunca lo denunciado por Rosa y, sin embargo, se dedican a hacer regalos a una persona que tanto daño estaba haciendo a una empleado suyo'. Sin olvidar, que incluso se personaron como acusación particular. Recoge que resulta reveladora la manifestación de la rumana que declaró que el matrimonio le había propuesto denunciar falsamente al profesor pero no aceptó.
Repara la jueza en el daño 'imparable' generado a la víctima con todo el plan urdido teniendo en cuenta que el delito imputado (agresión sexual) es de los que más rechazo social produce, sin olvidar la desestabilización que provoca algo así a una persona casada y con dos hijas, poniendo el foco en la pretensión calumniosa del matrimonio en el juicio al asegurar que la víctima iba a una casa de citas que regentaba Rosa Prieto.

http://www.laregion.es/noticia/257744/condenados/pagar/mujer/fingir/agresion/sexual/