Los jueces disponen de libro potestad para decidir, pero llevan décadas atribuyendo la responsabilidad del cuidado de los hijos a la madre sin valorar si es buena opción o no. Como norma estándar antes de entrar a la vista la mente del juez ya se encuentra precondicionada declarar a los menores huérfanos de padre vivo. El feminismo quiera ahora disfrazar el mensaje, aparentado que sí está a favor de la custodia compartida (Mitos de la custodia materna y errores de la compartida), y ojalá así fuera, pero en realidad su pretensión es la de mantener esa custodia materna impuesta que aplican los jueces y magistrados desoyendo la jurisprudencia del Tribunal Supremo.
El Supremo no solo ha creado una amplia jurisprudencia al respecto, sino que además ha visualizado en sus sentencias que colocar a los hijos en un reparto de tiempo desigual, en donde la figura del padre queda relegada a la posición de un visitante es una insensatez, pues existe el grave peligro que una madre que demanda que sus hijos se queden huérfanos de padre vivo colabore en aras de conseguir que los menores pierdan la relación con su padre (753/2015).
un compromiso mayor y una colaboración de sus progenitores tendente a que este tipo de situaciones se resuelvan en un marco de normalidad familiar que saque de la rutina una relación simplemente protocolaria del padre no custodio con sus hijos que, sin la expresa colaboración del otro, termine por desincentivarla tanto desde la relación del no custodio con sus hijos,
Fuente:
http://www.eldiario.es/cv/opinion/Carta-diputada-Caballero-custodia-compartida_6_514158603.html
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