CUSTODIA PATERNA: Las juventudes comunistas también mienten para atacar el Congreso de León sobre SAP y custodia compartida

lunes, 16 de mayo de 2016

Lunes, 16 de Mayo, 2016

El Congreso de León programado para los próximos 26, 27 y 28 de Mayo está siendo objeto de múltiples ataques por parte de asociaciones feministas, partidos políticos y todos aquellos que por norma se niegan a que los menores puedan disfrutar de los cuidados atenciones de su padre tras el divorcio o la separación.

Uno de las efectos que conlleva que los hijos tras la separación dejen de ver a uno de sus padres es la ausencia de esa figura. Basan sus críticas en que el SAP (síndrome de alienación parental) no ha sido aún reconocido a nivel científico, pero el nombre es lo de menos, lo importante es el daño que se produce en los menores, los cuales expresan un rechazo injustificado hacia uno de sus progenitores.

Estos grupos mienten y manipulan el discurso para hacer creer a la quienes desconocen de esta temática que quienes que el SAP o la manipulación parental solo es cosa de mujeres, que solo se acusa a las mujeres de malmeter o manipular a los menores contra el padre, pero cualquiera que haya leído por ejemplo el primer libro que se editó en España sobre este grave maltrato infantil, podrá ver como el especialistas relata casos de padres alienadores tanto por parte de madres como por parte de padres. El hecho de que en la mayor parte de casos los menores rechacen al padre y asuman el odio y rencor que alberga la madre contra la persona del padre es solo consecuencia en la mayor parte de casos de que los hijos tras el divorcio son apartados de su figura paterna, a la cual se convierte en un visitante, y la madre pasa a disponer de un tiempo (26 días, frente a 4) superior con los menores que es usado para malmeter a los hijos contra su padre.

En muchas ocasiones la causa por la cual por la cual se envenena a los menores deriva de que el progenitor alienador no acepta que el otro progenitor haya rehecho su vida tras la ruptura de la pareja, y en muchos casos es capaz de aceptar la ruptura de la relación, y como arma de venganza usan a los hijos para castigar al otro progenitor.