Se suele pensar que el divorcio o la separación es la solución cuando un matrimonio ya no desea seguir unido, se cree que los problemas se van a solucionar y que reinará la paz.
En la mayoría de los casos esto no sucede, ya que de inmediato surgen cambios en la vida tanto del hombre como de la mujer difíciles de afrontar.
- Ambos experimentan soledad, ya que están acostumbrados a compartir con el otro un espacio, tiempo, bienes, conversaciones, buenos y malos momentos.
- la convivencia con amigos y familiares ya no es lo mismo. Cada uno empieza a verlos por separado, o bien, a dejar de verlos
- a menudo los padres utilizan a sus hijos para enviar mensajes, obtener información del otro, y atraer así, su cariño y atención. O bien, los hijos aprovechan de esta la situación para manipular a los padres y tener beneficios tanto materiales como psicológicos.
Y desgraciadamente y aún hoy día en pleno siglo XXI, tras la separación el padre no se separa sólo de su pareja, sino que tras la seperación y bajo ese humillante calificado como "regimen de visitas" le divorcian al mismo tiempo de sus hijos. Éste es el mayor daño que produce una separación, pues lo hijos pasan a quedar huérfanos de un padre vivo, al que encima de le expulsa de la vivienda famliar y se le obliga a continuar asumiento el mantenimiento de ésta, aparte de la ya citado separación de sus hijos.
Fuente:
- Y después de un divorcio, ¿qué?
http://mundoejecutivo.com.mx/mujer-ejecutiva/2014/10/27/despues-divorcio-que
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