CUSTODIA PATERNA: Una congregación de monjas, único hogar para 25 mujeres víctimas de maltrato y sus hijos

viernes, 23 de agosto de 2013

Una congregación de monjas, único hogar para 25 mujeres víctimas de maltrato y sus hijos

Viernes, 23 de Agosto, 2013

Las adoratrices consiguieron un certificado de calidad para un servicio de atención integral que realizan en la Casa de Acogida

Manifestación contra el maltrato en la calle Santo Domingo

Luchan desde hace 100 años en Ourense "a favor de la liberación de la mujer y para ayudarla a salir de contextos de prostitución o de violencia de género", es decir cuando la mujer no tenía derecho a voto ni podía hacer gestión alguna sin la firma de su marido. Regentan la única Casa de Acogida de Mujeres Maltratadas de la ciudad, que da asilo en estos momentos y todos los gastos de manutención, formación reinserción social y laboral o escolarización a 25 personas, mujeres víctimas de maltrato y a sus hijos, algunos aún de corta edad y han conseguido una certificación oficial de calidad en reconocimiento a la profesionalidad de su trabajo social.
Contra todo pronóstico, las artífices de este complejo proyecto de ayuda a las mujeres maltratadas son monjas, en concreto religiosas de la orden de las Hermanas Adoratrices, tienen prohibido salir en la prensa para dar a conocer su labor y cumplen con sus votos de trabajar a favor de liberalización de la mujer, vestidas bajo un hábito.
Estos días su casi desconocida labor, que se desarrolla en pisos en la ciudad en los que las religiosas conviven con las víctimas de maltrato y con sus hijos, a los que ayudan y cuya ubicación es secreta por cuestiones de seguridad, salió a la luz, al quedar desierto el concurso convocado por el Concello para gestionar este servicio.
Ninguna empresa privada quiso asumir esta casa de acogida, que atendió a más de medio o centenar de hijos y madres en 2012, atención integral que incluye todos los gastos posibles para estas mujeres y niños que han huido del agresor desde casa, agua, luz, calefacción, ropa, escolarización material escolar, escolar, y personal especializado para ayudarles, desde letrado a psicólogas y educadores, con un presupuesto anual de 90.000 euros.
Si bien el programa Érguete Muller que da apoyo a las víctimas de maltrato es integral y cuenta con un equipo multidisciplnar para buscar su formación y reinserción, las incansables hermanas también van al foco y envían personal especializado a todos los clubes de alterne del municipio (fueron más medio centenar de visitas en 2012, ) para cercarse a ambientes de riesgo y repartir allí kits preventivos con preservativos masculinos y femeninos y material informativo del programa que las monjas realizan, para ayudar a todas aquellas mujeres que quieran salir de contextos de explotación sexual y/o prostitución.
Tal y como consta en su memoria, de actividades, , pues tanto la directora de la casa, como el resto de personal, desde coordinadoras a psicóloga educador social o asesoría jurídica, tienen prohibido dar a conocer públicamente su proyecto en la actualidad, el programa Érguete Muller ofrece talleres y otros programas alas mujeres acogidas "para disminuir las consecuencias destructivas del daño generado por la violencia de género en las mujeres".
Este programa deriva en otros proyectos como Alborar, que ofrece un servicio de acogida dirigido a mujeres que han sufrido violencia de género, junto a sus hijos.
El perfil de las usuarias
Durante el pasado año la Casa de Acogida ha dado atención a 29 mujeres y 24 menores. De los niños acogidos con su madres 11 tenían de 0 a 3 años y el resto oscilaban de los 4 a los 16 años.
Un total de 25 mujeres alegaron malos tratos físicos y psicológicos como motivo de ingreso y otras cuatro malos tratos psicológicos mientras que cuatro sufrieron además agresiones sexuales. En la mayoría de los casos los autores fueron sus cónyuges o parejas. Víctimas y agresores vivían en la zona urbana y la problemática añadida de las agresores, es que eran alcohólicos, toxicómanos y en algún caso ambas cosas a la vez.
Solo una de las víctimas que hicieron uso de la casa de acogida eran de nacionalidad española, y las edades medidas más habituales de las usuarios oscilaron entre los 26 a los 35 años; solo 5 tenían menos de 25,
Con todo, este equipo multidisciplinar que cuenta con un presupuesto muy inferior al de otras casas de acogida de la orden en Galicia y en España pues su función no es la rentabilidad, tienen un concepto claro de la mujer y de sus derechos. Así reconocen en su memoria anual que "La igualdad de género es muy difícil de lograr, ya que siguen existiendo unos niveles inadmisibles de discriminación y violencia contra las mujeres" indican.
"Esta violencia contra la mujer es un crimen, y sin embargo es universal, es decir, sucede en todos los países del mundo y en todos los niveles de la sociedad". Por eso su visión es que "hay que luchar contra la violencia a la mujer, mediante la denuncia social y potenciando siempre sus capacidades" .