CUSTODIA PATERNA: Retiran el bebé recién nacido a una madre acusada de lesionar a otro hijo

jueves, 27 de diciembre de 2012

Retiran el bebé recién nacido a una madre acusada de lesionar a otro hijo

Jueves, 27 de Diciembre, 2012

30/10/2010
Los médicos activaron el protocolo de posibles malos tratos, después de que su primer hijo ingresara en la UCI a los 39 días de vida

Imagen cedida por los padres de la habitación de los menores. El moisés se utilizó durante sólo 39 días.

La pesadilla para Vanessa y Antonio, un matrimonio de un municipio de la Costa Daurada, empezó a las 13.50 horas, días antes de las campanadas de 2010. Su bebé, de poco más de un mes de vida, palideció de golpe y su respiración se entrecortó. Tanto la madre como la abuela (aquel día había comida familiar) intentaron reanimarlo sin conseguirlo. «Ya vi que no estaba nada bien y que respondía de una forma muy extraña», explica la madre.
Los padres, de menos de 30 años, llevaron al bebé al CAP y tras la primera observación fue activado un helicóptero medicalizado para llevarlo hasta Barcelona. «Cuando llegamos al Hospital de la Santa Creu i Sant Pau nos preguntaron si se había caído. Contestamos que nada de eso. Él es un bebé que desde el primer día es muy inquieto y que ese día se levantó sólo más desganado», explica el padre.
Interrogatorio de los Mossos
Paralelamente a las explicaciones de los padres, el hospital barcelonés activó el protocolo de posibles malos tratos y horas después de que el bebé entrara en la UCI, los Mossos d’Esquadra interrogaban a los padres en el mismo hospital. «Nos llegaron a amenazar de que si el bebé moría, íbamos directos a la cárcel», recuerda la madre.
Los médicos del Sant Pau descubrieron hemorragias subconjuntivales bilaterales, hemorragias retinianas, erosiones y hematomas en la cabeza, manos y pies y otros síntomas que invitaban a dudar de la versión paternal. No obstante, Vanessa y Antonio no entendían qué pasaba. «Tuve un parto muy duro. Soy estrecha de cadera y la salida del niño (unos 3,5 kilos y 53 centímetros) estuvo bloqueada durante mucho tiempo hasta que al final me tuvieron que practicar una cesaria de urgencia, de la que necesité más de cuatro meses para recuperarme del todo», recuerda la madre, quien achaca a esas más de 14 horas de parto todos los males de su primer bebé.
Alta y al centro de acogida
Al día siguiente del ingreso, la Direcció d’Atenció a la Infància i a l’Adolescència (DGAIA), perteneciente al Departament d’Acció Social de la Generalitat, dictó una resolución decretando, de manera cautelar, el desamparo preventivo del menor y asumiendo las funciones tutelares. El bebé se recuperó y en un mes se le dio el alta. Desde entonces está en un centro de acogida en Tarragona.
A pesar de la decisión de la Generalitat, los padres intentaron desde el primer minuto recuperar a su bebé. Escritos, reuniones, exámenes psicológicos... «No había manera. Decían que hasta que no hubiera una resolución, ellos cuidaban del pequeño», apunta el padre.
Fuentes de la DGAIA también admiten que el entorno de la pareja tampoco estaba por la labor de asumir la responsabilidad del bebé y los padres responden argumentando que «a mis padres les pedían más información de sus posesiones que no de su capacidad y los de mi marido, por problemas de salud, es inviable que cuiden a mi hijo», sentencia la madre.
Visita una hora por semana
Cuando el bebé llegó a Tarragona, el horario de visitas fue muy estricto: una hora (de 13 a 14 los lunes) de 168 que tiene la semana. «Cada vez que íbamos, nos pedían que confesáramos los malos tratos. No podemos decir lo que jamás hemos hecho», explican los padres. La situación desembocó en la contratación de un abogado y la correspondiente denuncia al Juzgado de Familia. El juez ha dictado la vista para el primero de marzo de 2011.
Paralelamente a la denuncia contra la Generalitat, los padres han enviado infinidad de escritos a la propia DGAIA, al Síndic de Greuges, al presidente José Montilla e incluso al Rey. «Jamás han atendido una ampliación de horario o modificación del día. Argumentan (la DGAIA) que sería un trauma para él. En cambio, el lunes (día de Todos los Santos) no iremos porque es festivo y sí podremos verlo el martes. ¿Si nosotros pedimos un cambio de horas hay trauma y si lo hacen ellos, no pasa nada?», se desespera Vanessa.
Para apoyar la demanda contra la Generalitat, la familia encargó un informe médico pericial que elaboró José Antonio Cañas, licenciado en Medicina y Cirugía por la Universitat de Barcelona y con un máster en valoración de daño corporal de la URV. El informe llega a varias conclusiones, pero en ninguna de ellas considera que las lesiones procedan de malos tratos (como por ejemplo el síndrome del niño zarandeado). El experto apunta al complicado parto de Vanessa como origen de las diferentes patologías detectadas en el bebé.
Segundo hijo
Hace pocas semanas, Vanessa y Antonio fueron de nuevo padres. Tuvieron el bebé en la Clínica Monegal por cesárea. Todo salió a pedir de boca y el bebé estuvo con sus padres las primeras horas. «Al poco de nacer vinieron dos funcionarias para llevarse al pequeño y les dije que no sin una orden judicial. Dos días después, con el alta, nos vinieron los Mossos y se lo llevaron. Nos amenazaron de que lo harían con o sin resistencia. Ahora está en manos de una familia de acogida y sólo lo vemos junto a su hermano el mismo día», explican tristes sus padres.