Según una testigo del caso Madrid Arena, Belén Langdon, su amiga, una de las cinco chicas que falleció en el incidente, Katia, las últimas palabras que pronunció fueron destinadas a su padre.
Desde aquí al menos, no hemos escuchado comentar a nadie la trascendencia o motivo por los cuales Katia se acordó en esos últimos momentos de su padre, y todo son y serían suposiciones, pero de lo que no cabe duda es que con casi certeza, ese padre ha sido un padre de de verdad para ella, pues suenan sus palabras como si tras de ellas se escondiera un enfrentamiento propio de una joven adolescente de su edad con su figura de autoridad. Son muchos los casos entre padres e hijos en donde los hijos, sin sentirlo, manifiestan al padre (o a la madre) en un momento dado unas palabras que en su interior no sienten, pero que fruto de los límites de esa figura parental, y aparejado a la edad del hijo, sino se dicen en muchos casos seguro que muchas personas que leen estas líneas las han pensado en su interior, aunque solo ese en ese preciso instante de rabia, con razón o sin ella.
"Me muero, no puedo más dile a mi padre que le quiero"
Hay quien apunta que el hecho de que solo fallecieran chicas y no chicos, es derivado de la educación y esas reglas y valores que se configuran bajo la sociedad de género, esa que cree en una igualdad que permite disponer ventajas para las chicas en contra de perjuicio contra los varones. El hecho de que jóvenes adolescentes no murieran puede ser debido a que puesto que se reclama igualdad y se aplica igualdad en contra de los jóvenes y adultos varones, pues cada que se apañe cómo pueda.
Fuente:
http://www.telecinco.es/informativos/sociedad/Madrid_Arena-avalancha_Madrid_Arena-tragedia_Madrid_Arena_2_2129955109.html
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