Artículo que presenta datos de como se manipulan las cifras y porcentajes respecto de las denuncias y condenas por violencia de género.
Denuncias hay muchas, de ahí parte el negocio. Ya sólo con interponer la mujer la denuncia entra en juego una serie de recursos humanos y materiales que comienzan a mover esos 24.000 millones de euros anuales que recibe España desde Europa. Nada más la mujer denunciar se activa el protocolo de violencia de género, el cual procede a la localización del varón para ser detenido por los agentes de la autoridad. Tras la detención, éste es conducido y encerrado a los calabozos hasta que toque su turno ante el juez. En los calabozos puede pasar horas o días, depende, Pero la gran parte de hombres suele como mínimo dormir una noche en el calabozo.
Las condenas realmente son pocas, y teniendo en cuenta que en España se condena a los varones por tirarse un pedo delante de su mujer o mandar a ésta a la mierda. Y ya si hablamos de las órdenes de protección nos echamos las manos a la cabeza, pues tras dicha medida de protección para la mujer (que es muy distinta a una orden de alejamiento) entra en juego otra serie de recursos económicos que son gran parte de la fuente del dinero que mueve este negocio, y que alimenta algunas asociaciones feministas que directamente gestionan en concreto los recursos de estas órdenes de protección .Hablamos de las casas de acogida. Con una orden de protección la mujer puede hacer uso de una casa de acogida, además de que pasa a percibir una cantidad mensual por cada hijo que tenga.
Otro dato que contiene también el artículo es el de la colaboración de la mayor parte de medios de comunicación, ya que éstos también se llevan tajada de esos tantos miles de millones de euros convertidos en un negocio que destroza familias por completo, arruina la vida de muchos varones llevando las cifras de suicidio de hombres a un millar aproximadamente cada año, y sin duda provoca de inmediato un maltrato con los menores, los hijos, los mayores afectados de toda este negocio. Con una denuncia de violencia de género la mujer no solo consigue de forma inmediata unas medidas provisionales para el divorcio, sino que además logra apartar al hijo de su padre, ya que como la práctica judicial impone la custodia para la madre, desde estas medidas provisionales el padre pasa a convertirse en un mero visitador de sus hijos cuya única obligación es la pagar la pensión de alimentos y correr con los gastos de la vivienda familiar que ocupará la madre con la excusa de que ostenta la guarda y custodia de los hijos.
Cada informe sobre violencia de género provoca una cascada de lugares comunes constreñidos por lo políticamente correcto. Se convierten en tabú datos como que la inmensa mayoría de denuncias no acaba en condena, que se producen en procesos de ruptura y que generan un gran negocio.Las 5 claves que presenta el medio fuente:
1.- La mayoría de las denuncias no acaba en condena
2.- Los grandes medios de comunicación, rehenes felices
3.- Ruptura familiar y denuncia: vencedores y vencidos
4.- La denuncia como baza estratégica
5.- El negocio de las denuncias instrumentales
Fuente:
5 claves sobre las denuncias por violencia de género que nadie te cuenta
https://www.actuall.com/criterio/familia/5-claves-las-denuncias-violencia-genero-nadie-te-cuenta/
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