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http://www.abc.es/agencias/noticia.asp?noticia=1186138La Audiencia ha revocado la multa impuesta a una madre que incumplió el régimen de visitas que tenía concertado con el padre de su hijo porque se trasladó con el niño a otra provincia para hacer unas prácticas de trabajo.
El Juzgado de Instrucción número 1 de Santander condenó a esta mujer a pagar 150 euros de multa, pero la Audiencia revoca ese fallo porque cree que no hubo culpa, ya que comunicó ese traslado y las visitas se retomaron cuando volvió, tres meses más tarde.
La mujer y el padre de su hijo habían sido pareja durante varios años y habían dejado la relación cuando ella estaba a punto de dar a luz.
El Juzgado fijó una serie de medidas de mutuo acuerdo en relación a las visitas al niño, que se cumplieron hasta que en junio del pasado año la mujer se fue a vivir a Badajoz por tres meses para hacer unas prácticas laborales.
La sentencia añade que las visitas se reanudaron cuando terminó ese periodo de prácticas.
Pero el Juzgado de Instrucción condenó a la mujer por una falta contra las relaciones familiares a pagar una multa de 150 euros.
Su defensa recurrió esa decisión y alegó que el régimen de visitas se incumplió por motivos laborales y que el padre tuvo conocimiento del cambio temporal de domicilio.
También dijo que, tras su regreso a Santander, se restablecieron las visitas con normalidad.
La Audiencia entiende que en el comportamiento de esta mujer no hay culpabilidad para fundamentar una condena y resalta que hubo una comunicación previa al Juzgado de Primera Instancia y al padre de ese traslado temporal por motivos laborales.
La Sala añade que el padre no hizo ninguna manifestación en el pleito civil e incide en que nada más regresar a Santander se reanudó el régimen de visitas con toda normalidad.
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