Las mujeres que se casan con dudas aumentan el índice de divorcios

Domingo, 16 de Septiembre, 2012

- Quienes no están seguras de dar el paso tienes hasta dos veces y media más de posibilidades de que su matrimonio acabe en divorcio en cuatro años.
- No ocurre lo mismo cuando los que no lo tienen claro son ellos

Las mujeres que tienen dudas a la hora de casarse deberían pensárselo dos veces porque tienen muchas probabilidades de que su matrimonio acabe mal según un estudio realizado por la Universidad de California, en Los Ángeles, Estados Unidos, y publicado en ‘Journal of Family Psychology’.
A pesar de que la mayoría de las personas piensa que es normal vacilar cuando llega el momento de dar el paso, según los investigadores el que las mujeres tengan dudas antes de casarse es sinónimo de menor satisfacción en el matrimonio y mayor índice de divorcios.
En el estudio participaron 232 parejas de recién casados, ellos con una media de edad de 27 años, y ellas de 25, que fueron observadas durante sus primeros meses de matrimonio y, posteriormente, cada seis meses durante cuatro años.
Cuando en la entrevista inicial se les preguntó si estaban seguros de querer casarse, el 47 por ciento de los novios dijo que sí, mientras que el porcentaje de mujeres que respondió afirmativamente fue del 37 por ciento. De hecho, el 19 por ciento de novias que dijo tener dudas se había divorciado cuatro años después, mientras que entre las que no las tenían se habían separado el 9 por ciento.
Entre los hombres el porcentaje disminuye, ya que entre los que dijeron no tenerlo claro, el 14 por ciento acabó divorciado, mientras que, al igual que en el caso de las mujeres, el 9 por ciento de los que estaban seguros de querer casarse acabó separado.
En la investigación también se preguntaron otros aspectos como si los padres estaban divorciados, o si los novios habían vivido juntas antes de casarse. En el 36 por ciento de las parejas ninguno dijo tener dudas con respecto a dar el paso. Entre ellas, el 6 por ciento acabó divorciada al cabo de cuatro años.
Cuando sólo era el hombre el que no lo tenía claro, el 10 por ciento de las parejas decidía separarse, un porcentaje que se incrementaba al 18 por ciento cuando era ella la que dudaba. En cambio si ninguno de los dos lo tenía seguro, el índice de separaciones ascendía al 20 por ciento.
De esta manera, las conclusiones a las que se han llegado a través de esta investigación es que en las mujeres las dudas tienen un mayor significado que en el caso de los hombres. De hecho, aquellas que las tienen antes de casarse presentan hasta dos veces y media más de probabilidades de acabar divorciadas en los cuatro años siguientes que quienes están seguras de lo que van a hacer. Las dudas son por tanto un factor decisivo que refleja el grado de satisfacción en una relación.

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