Enlaces:
- La verdad sobre los salarios de mujeres y hombres
- Motín de mujeres en la Comisión Europea contra las cuotas femeninas de Reding
- Nueve países, contra la cuota femenina del 40% en los consejos de administración
- Bruselas quiere sancionar a las empresas que incumplan la cuota femenina
Patricia Gabaldón, Economista de IE Business School El 14 de noviembre de 2012, Vivian Reding, Comisaria Europea de Justicia, tuiteó el siguiente mensaje: “La Comisión ha aprobado mi propuesta de Ley Europea para que haya 40% de mujeres en los consejos de administración para 2020”. Esta iniciativa propone un objetivo del 40% para la presencia del género menos representado (femenina, en la mayoría de los casos) en los consejos de administración, una cuota "de género". Si bien la noticia saltó en ese momento, la realidad legislativa de esta iniciativa no es tan sencilla, ya que a pesar de que fue aprobada por unanimidad, solo afectaría, en principio, a grandes empresas que coticen en Bolsa y cada Estado debe desarrollar su propia ley nacional y correspondientes sistema sancionadores. Además de ser aprobada por el Parlamento Europeo.http://blogs.elpais.com/via-ie-business/2012/12/el-reto-de-las-cuotas-en-los-consejos-de-administraci%C3%B3n.html
Que las mujeres no están llegando a las cúpulas de poder de las grandes empresas no es nuevo: en España, solo alrededor del 30% de los directivos y el 11% de los consejeros de grandes empresas son mujeres. En España, ya disponemos de herramientas legislativas como la Ley de Igualdad y el Código de Buen Gobierno de la CNMV, el llamado “Codigo Conthe”. Ambas iniciativas se enmarcan dentro del sistema “comply or explain”, que significa que como no hay un sistema sancionador, las empresas que no cumplan los requisitos exigidos, deben explicar a sus accionistas y a los organismos reguladores por qué no ha sido así. Gracias a estos cambios, la presencia de mujeres en consejos de administración ha crecido pero sigue estando lejos de estar en igualdad de representatividad. A este ritmo, harían falta al menos otros 30 años para poder llegar al 40%.
Los argumentos a favor de la cuota son sencillos, ya que se trata de una estrategia que busca cambiar la situación actual “desde arriba”. Si dejamos de lado la justicia social (las mujeres son la mitad de la población y deben tener acceso a al menos la mitad de las posiciones de poder), la inercia que se crea en la selección de los miembros que componen los consejos hace que los perfiles que se eligen sean muy parecidos entre ellos. La cuota rompería esta inercia incorporando nuevos perfiles a los puestos de mando. Perfiles menos habituales a los tradicionales, que podrían servir de ejemplo (role model) para otras mujeres dentro de la empresa. Por otro lado, para las mujeres que ya estén en puestos directivos, la cuota sería una manera directa de romper el “techo de cristal.
Sin embargo, los argumentos en contra de la cuota son casi tan potentes como los que se presentan a favor. El principal es el derecho de las empresas a tomar sus propias decisiones, y el de los Estados (la Comisión Europea, en este caso) a intervenir en las decisiones de estas empresas privadas, que se rigen por criterios de eficiencia y de búsqueda del beneficio. Si realmente la diversidad es un valor generador de riqueza para la empresa, debería ser la propia empresa la que decidiera la incorporación de otros perfiles, buscando los que más se adecuen a sus necesidades. Además, puede que la entrada de las mujeres a los puestos de poder sea solo una cuestión de tiempo. Y por parte de las propias mujeres, ser considerada una “mujer-cuota” genera rechazo ya que minusvalora sus méritos.
La cuota busca cambiar la realidad empresarial como una manera de cambiar la realidad social. La cuestión esencial a plantearse es si realmente este cambio legislativo generará este cambio. El debate sigue abierto.
Patricia Gabaldón, la profesora de entorno económico en IE Business School lleva más de diez años dedicada a la docencia y la investigación en el ámbito de la economía de las familias y al papel de las mujeres dentro del desarrollo y el crecimiento económico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario