MEXICO
Enlaces:
- Programa grupal de apoyo para adolescentes hijos de padres separados o divorciados
- Declaración universal de los derechos humanos de los hijos de padres divorciados
Enlace a página de web de despacho de abogados en México especialistas en divorcios
Silvia González Romero (*)http://yucatan.com.mx/editoriales/los-hijos-de-padres-separados
Las adicciones
Una realidad apabullante que ya no podemos evadir es que más del 50% de los matrimonios termina en separación o divorcio, lo que ha dado paso a una generación de hijos de padres divorciados que están transformando la dinámica familiar y social.
Las recientes fiestas de fin de año fueron para muchos hijos de padres divorciados unas celebraciones llenas de estrés porque su realidad está dividida y su tiempo también. Algunos experimentaron por primera vez el desapego frente a alguno de sus padres, y una realidad distinta a la acostumbrada que en muchos casos les generó incomodidad, ansiedad.
Entender la dimensión del suceso es sumamente importante para los adultos que están cerca de ellos para que eviten minimizar o trivializar la situación que, aunque generalizada, no deja de ser una de las experiencias más traumáticas y dolorosas para un ser humano.
El trabajo en consejería nos evidencia cómo muchos de estos niños y adolescentes caen en depresión, desánimo, alteraciones en su comportamiento, todo ello por la pérdida de la convivencia original y la ausencia en la vida cotidiana de alguno de sus progenitores.
Estos cambios deben afrontarse con ayuda terapéutica, ya que la dimensión de los efectos puede ser profunda y duradera. Atravesar sin apoyo el divorcio es como atravesar un campo minado “a tientas y a ciegas”, sin dirección ni protección; genera tal cantidad de ansiedad y angustia que se le considera una de las heridas emocionales más profundas, sólo equiparable a la pérdida por muerte de un hijo.
No debemos minimizar el dolor e inseguridad que les genera a todos los miembros de la familia un suceso que afectará su vida para siempre.
Es indispensable que los padres mantengan sus rencillas y desacuerdos fuera del ámbito de los hijos si desean evitar males futuros, ya que muchos adolescentes si no son bien dirigidos y atendidos en esos momentos, pueden convertirse en presas fáciles de adicciones como el tabaco, el alcohol, el juego, el chateo compulsivo, la pornografía, etc.
Es muy importante recibir orientación para que la herida del divorcio sea lo menos dolorosa y traumática posible, tanto para los padres cómo para los hijos.
Hay que fomentar la convivencia con el padre que no vive con ellos, ya que eso le dará seguridad y sensación de permanencia a los hijos, y calmará su ansiedad por abandono.
Se debe permitir a los hijos que expresen sus sentimientos de tristeza, dolor, molestia, incluso ira por la situación que están viviendo, y ayudarlos a que encuentren maneras saludables de canalizar esos sentimientos.- Mérida, Yucatán.
silviaglezr@hotmail.com
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*) Presidenta de Voces de Prevención
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