La violencia femenina se ejerce y lleva a cabo sin que ni siquiera se considere como tal, sin darse cuenta el hombre es maltratado por su compañera, pero bajo es orgullo no permite aceptar convertirse en una víctima de su compañera. Cita la noticia el libre de "El varón domado" (Esther Vilar), como argumento para exponer que muchos hombres hasta que no han leído de manos de una mujer que son violentados y maltratados no han sido capaces de aceptar por su orgullo que la violencia que padecen es causada por una mujer.
El psicólogo español Cano Gil, manifiesta como a la mujer le resulta prácticamente asumir cualquier conducta femenina ejercida por su persona contra su compañero, y culpabiliza al varón de cualquier problema que se produzca en la pareja.
Una de las conclusiones es la de que al igual que hay mujeres que padecen en silencio el maltrato por parte del marido, de igual forma tenemos muchos hombres que callan, ocultan y disfrazan la violencia a la que son sometidos en el interior del hogar. No es nada fuera de lo común encontrarse con matrimonios en donde el varón es un muñeco en manos de la mujer en el interior del hogar, pero que sin embargo fuera del mismo ha de asumir el papel de ser quien como dice el dicho "lleva los pantalones", llegando incluso al extremo de que en ocasiones en público la mujer ha de intervenir y por lo bajo recordar al hombre que debe ser él quien adopte la decisión o iniciativa, pues la falta de costumbre lleva a estas situaciones.
Fuente:
Nacho Ledesma
http://alef.mx/desnudando-a-eva-la-violencia-femenina/
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