(la @ es uno de los elementos dispuestos para eliminar los símbolos de los masculino)
El autor del texto es quien firma al final del mismo.
LOS GRANDES OLVIDADOS DE LA CUARENTENA
Pero no puedo dejar en el olvido de esta cuarentena, tal vez por ser parte sufridora o tal vez porque en momentos de soledad hay que intentar encontrarse con lo más profundo de uno mismo, sin poder olvidar jamás la ausencia de nuestros hij@s.
La dureza y crueldad de la situación que estamos viviendo tantos PADRES amputados del vínculo más preciado, nuestros hij@s, no hace otra cosa que ratificarme en mi amor incondicional hacia esas pequeñas personitas que jamás eligieron venir al mundo para sufrir la orfandad deleznable de no tener un PADRE.
Existe una abismal diferencia entre ser progenitor y ser PADRE.
Cuando en estos momentos todos apelamos a la humanidad y caridad de las personas, no podemos olvidarnos de tantos niñ@s huérfanos de PADRE.
La impotencia, indignidad, y la rabia que hoy sufrimos tantos hombres en esta cuarentena, multiplica exponencialmente la tristeza y el vacío que tantos hij@s están sufriendo. No les pidamos que lo entiendan, ellos no están aquí para entender esto.
Nuestra muerte en vida sobreviviendo a esta situación hace aún más desgarrador el pensamiento de buscar respuesta a lo que ellos están sufriendo.
Vinieron a este mundo para ser felices, para que la ingenuidad de sus primeros años siempre estuviera bajo el paraguas de un referente paterno en el cuál sentirse protegidos. Ellos necesitan para su estabilidad emocional y crecer cada día como personas, alimentarse de sus DOS referentes a los que apoyarse sintiéndose queridos.
Cuando las lágrimas de los corazones de tantos hombres, ahogan el mayor instinto de ser padre y no progenitor, hace que vuelva al principio de mi relato, "Los grandes olvidados de la cuarentena".
Mi epílogo no es otro que aludir a la única luz que ahora ilumina mis ojos, la única por la que cada día abre mi razón al despertar...
MI PEQUEÑA GRAN MUJER, MI HIJA
Fdo. Fernando González
Fuente:
Fernando González
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