Día 10/11/2011
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Un menor de 15 años, cuya custodia había sido otorgada por la Junta a su padre, acabó retenido por su propia madre y por el compañero sentimental de ésta, que finalmente hizo que se prostituyera a cambio de dinero, según ha revelado la investigación policial que acabó con la detención tanto de la madre del menor, como de su compañero y del cómplice que cedió un domicilio para que el adolescente permaneciera oculto mientras la Policía lo buscaba.
El caso se remonta al pasado mes de agosto, cuando el menor desapareció de su domicilio en Morón de la Frontera, del que había salido para irse con unos amigos. Tras la denuncia del hecho por parte del padre, los funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía que iniciaron la investigación no tardaron en centrar su atención en la madre del menor, a la que la Junta había retirado la custodia. Además, los propios amigos del adolescente señalaron a la madre como la persona con la que el menor se había marchado de manera voluntaria. Sin embargo, las pesquisas emprendidas por la Policía no posibilitaron la inmediata localización del muchacho en el entorno de su madre, residente en el municipio de Utrera, ya que el menor resultó que había sido alojado en domicilios de Cádiz, Chipiona y Utrera con la colaboración de un cómplice de la mujer, ante la más que posible eventualidad de que la Policía se personara en el domicilio de la progenitora.
La investigación, sin embargo, no sólo puso al descubierto el último domicilio donde se encontraba el menor, en Utrera, sino que reveló algo mucho más inquietante, como era que el compañero sentimental de su propia madre lo había introducido en el mundo de la prostitución.
Así las cosas, una vez que el menor fue localizado y devuelto a su padre, los investigadores procedieron a la detención de la madre, identificada como B.P.R., de 44 años, y de su actual pareja sentimental, cuya identidad responde a las iniciales A.B.G., de 37 años, a quienes se imputan los delitos de inducción al abandono del hogar y sustracción de menores.
Asimismo fue detenido J.M.M.S., de 27 años, por un delito de encubrimiento, ya que fue el encargado de mantener oculto al menor. Este individuo también ha sido imputado de un delito de atentado a agente de la autoridad, puesto que que hirió a dos policías al resistirse a ser detenido. A estos cargos se suman también los derivados del incumplimiento de cinco condenas de alejamiento. El último de los detenidos fue J.J.L.G.C., de 59 años, a quien se imputa un delito de prostitución de menores y otro de corrupción de menores, al haber aceptado los «servicios» del adolescente.
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