Madre pakistaní que mató a su hija: "Era su destino morir así"

Lunes, 19 de Noviembre, 2012

La niña falleció entre atroces dolores dos días después de que sus padres la rociaran con ácido por un supuesto «crimen de honor»

Captura del vídeo difundido por la BBC

Una mujer paquistaní, acusada de haber matado a su hija arrojándole ácido por sospechar que mantenía una relación con un chico, asegura que era su «destino» morir así, en una entrevista difundida hoy por la BBC.

Zaheen Zafar y su marido Mohammed fueron detenidos la semana pasada por la policía en un distrito de Cachemira administrado por Pakistán, tras la muerte de Anusha, su hija de 15 años. La joven murió entre atroces sufrimientos en el hospital dos días después de haber sido rociada con ácido.

Los padres confesaron el crimen y señalaron que su hija les había deshonrado al conversar con un joven fuera del domicilio familiar, según la policía.

Interrogado en prisión por la BBC, Mohammed Zafar ha explicado que le advirtió de que no debía mirar a los hombres. Su esposa ha confirmado por su parte las advertencias, añadiendo que su hija pidió perdón.

«Ella dijo: "No lo hice adrede, no lo haré más". Pero ya le había rociado de ácido», ha relatado Zaheen, marcada en el brazo por las huellas del ácido. «Era su destino morir así», ha añadido.

Los padres de Anusha esperaron dos días antes de llevarla al hospital, donde llegó «en estado muy crítico», con cerca del 70% de la piel abrasada, según médico del centro.

La hermana mayor de la adolescente contactó con la policía poco antes del entierro para pedir la apertura de una investigación sobre su muerte, que condujera al arresto de sus padres.

Según la Comisión paquistaní de los derechos del hombre, al menos 943 mujeres o niñas han sido asesinadas el año pasado en Pakistán por sus familiares tras haber sido acusadas de haber cometido crímenes de honor. Son más habituales en las zonas más pobres y atrasadas de este país musulmán muy rural y conservador.

Las mujeres son tratadas a veces como objetos o monedas de cambio, poco protegidas por la policía y a menudo bajo la presión de sus familias que les disuaden de denunciar para no avergonzarles.

Según una enmienda adoptada el año pasado por la asamblea nacional, los autores de ataques con ácido, una forma de violencia que desfigura cada año a más de 200 mujeres en el país, pueden enfrentarse a una pena mínima de 14 años de cárcel.

http://www.abc.es/20121105/internacional/abci-madre-mato-hija-pakistan-201211051415.html