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domingo, 2 de junio de 2013

Piden 4 años de cárcel para una mujer acusada de raptar a su hija

Domingo, 2 de Junio, 2013

colegio de Viveiro
Recogió a la niña en un colegio de Viveiro y la llevó a Francia
Una mujer afronta una petición de cuatro años de cárcel porque el fiscal la acusa de raptar a su propia hija a la salida del colegio en Viveiro. El acusador considera que la imputada no tenía la custodia de la menor y que se la arrebató a su padre, quien presentó una denuncia ante la Guardia Civil. La acusada, que acabó llevándose a la hija a Francia, donde residía por cuestiones de trabajo, dijo ayer en el juicio que tuvo lugar en Lugo que no había absolutamente ninguna sentencia que dijese que la joven, de 14 años, debía estar con su padre. Simplemente, recordó, existen unos papeles firmados en la República Dominicana, país del que son oriundos los protagonistas de esta historia.
El padre, que el día que su hija no regresó a casa se alarmó, y movilizó a la Guardia Civil aun sabiendo que la muchacha podía estar con su madre, dijo en el juicio que la joven estaba mejor con su progenitora que con él. Pese a esta marcha atrás, el fiscal mantuvo la petición de cárcel para la imputada.
El acusador público destacó que la mujer llevó a la niña en contra de la voluntad de su padre y que, cuando la Guardia Civil la requirió telefónicamente, después de rastrear todos los hoteles viveirenses para detenerla y evitar que no abandonara territorio español, hizo caso omiso. El hecho ocurrió el 26 de enero del 2010 y actualmente la menor reside en Francia con su madre.
«Nunca hubo un juicio para decidir a quién correspondía la custodia de mi hija. Había un papel a efectos de la aduana. Yo llegué a un acuerdo con su padre para recogerla. Incluso él me dio la dirección porque yo no sabía ni dónde estaba Viveiro. Cogí vacaciones y vine a buscarla», declaró la madre. En su intervención dijo que su padre le había pedido en algún momento que esperara a venir mientras no arreglaba unos papeles. «Estábamos de acuerdo los dos», recalcó.
Según la versión de la imputada, era la madrastra de su hija quien no quería que esta dejase Viveiro. Sospecha que en algún momento la escondió. También recordó que la menor utilizó el dinero que le daban para comprar golosinas para poder llamarla a ella por teléfono. Recordó finalmente que no hubo rapto de ningún tipo porque, cuando llegó a Francia, la muchacha habló telefónicamente con su padre y en dos ocasiones fue a verlo a Viveiro.
La custodia
El padre de la joven dijo que él tenía la custodia de la misma desde que la trajo de la República Dominicana. «Su madre se puso en contacto conmigo para decirme de repente que venía a buscar a su hija», explicó. Después de contar que había denunciado la sustracción, dijo que la pequeña quería estar con su madre y recordó: «Con ella está mejor; yo la tengo cuando quiero, siempre puedo hablar con ella y fue un error por mi parte presentar la denuncia». Añadió que no tenía mucho tiempo para ocuparse de la menor porque atendía el bar que regentaba desde las ocho de la mañana a las tres de la madrugada. En cuanto a una posible mala relación entre la pequeña y su madrastra señaló: «Quizás pasaron cosas de las que yo no me enteré, aunque delante de mí no hubo maltrato. Después de que yo lo hubiese pasado muy mal, me di cuenta de que mi hija está mejor con su madre. Trabajé mucho para poder traerla a Viveiro y yo la quiero».
http://www.lavozdegalicia.es/noticia/galicia/2013/06/01/piden-4-anos-carcel-mujer-acusada-raptar-hija/0003_201306G1P10993.htm

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