Es la golosina que colocan para la mujer, denuncia a tu novio, pareja o marido, que de esa forma vas a recibir dinero. Pero de esas partidos millonarias que se disponen para la violencia de género, las asociaciones feministas "pillan" tajada, por lo que feministas radicales como Lidia, matan dos pájaros de un tiro. Por un lado sacian su odio contra el varón encerrando a éstos en prisión, y por otro lado se lucran económicamente a través de las supuestas ayudas para maltratadas.
DOSCIENTAS MEDIDAS, repito asombrada, y me pregunto ¿son necesarias tantas? Siguiendo la guía que nos marcan los Diez Mandamientos diría que éstas se resumen en dos: meter en la cárcel a los maltratadores y dar ayudas económicas a las víctimas.Uno de los objetivos más perseguidos por este feminismo radical e inmerso en el odio al varón, es el de causar el mayor daño a través de lo que conocen bien es la mayor prioridad para la mayor parte de ellos: los hijos:
Todavía ni siquiera se han puesto de acuerdo en retirar el régimen de visitas, la custodia y la patria potestad de los desgraciados menores sometidos al poder omnímodo de machos maltratadores, violadores y asesinos, porque se deben seguir preservando los privilegios del patriarca.Por otro lado, ella mismo manifiesta como de esas partidas de miles de millones de euros, son muchos los organismos entre quienes se reparte:
Gracias a los resúmenes que se difunden por las redes me he enterado de que quieren aumentar el dinero destinado a las víctimas y sus defensas y terapias y casas de acogida, pero poquito a poco. En cinco años o así. Y que se lo repartirán a los Ayuntamientos para que ellos carguen con la molestia de atender a las llorosas féminas con sus churumbeles gritones agarrados a las faldas. Que ampliarán la red de casas de acogida, gabinetes asesores y terapéuticos, y poca cosa más. Como también que ahora se enterarán de que una mujer es víctima de maltrato sin necesidad de que vaya a la policía a denunciar, cosa que por lo visto hasta hoy no sucedía. Porque ¡tantas técnicas de igualdad, asistentes sociales, policías municipales, médicos, forenses, psiquiatras, y otros profesionales ad hoc, que pagamos, eran incapaces de saber que la mujer que acudía a su consulta con un ojo morado o un brazo roto no se había dado un golpe con una puerta o caído por la escalera!.
Cito literal:"...una ley que obligue al acusado a demostrar su inocencia y exonere a la víctima de aportar pruebas" https://t.co/7ubhX57uOM— María Jamardo (@MariaJamardoC) 23 de julio de 2017
Fuente:
El pacto del engaño
http://blogs.publico.es/lidia-falcon/2017/07/22/el-pacto-del-engano/
1 comentario:
El pacto de los lobos debería llamrse
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