El juez Francisco Serrano fue invitado por un grupo de abogados para contrarrestar el veto impuesto por entidades feministas radicales a su participación en el Congreso de la Familia. Los organizadores señalaron que habían invitado a esas asociaciones, pero que habían excusado su asistencia "por cuestión de agenda". 19/jun/10
DORY MERINO, Tenerife
El juez Francisco de Asís Serrano fue recibido ayer con aplausos a su entrada en el salón de actos del Colegio de Abogados de Santa Cruz de Tenerife, donde expuso que desconoce en base a qué artículo ha sido expedientado por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y afirmó que los pocos jueces que en España se han atrevido a criticar "lo políticamente correcto tienen expedientes disciplinarios abiertos".
El magistrado de Familia de Sevilla acudió a Tenerife invitado por un grupo de abogados para contrarrestar el veto impuesto por entidades feministas radicales a su participación en el Congreso de la Familia, que se celebró en Santa Cruz hace unas semanas, presidido por Raimundo Moreno, que ayer se encontraba entre los asistentes.
El juez Serrano señaló que el último expediente que le ha abierto el CGPJ "está motivado por una supuesta incompatibilidad al haber presidido la Asociación Española Multidisciplinar de Investigación sobre Interferencias Parentales (de menores de edad) sin solicitar permiso al órgano de gobierno de los jueces".
En su ponencia puso de manifiesto que se enteró "por la prensa" y recordó que a los jueces se les impone una fuerte sanción cuando se filtran los autos.
"Si se filtrase a la prensa una sentencia judicial mía antes de ser notificada a las partes, me abrirían un procedimiento penal y además con motivo, porque sería constitutivo de un delito de infidelidad en la custodia de los documentos".
Subrayó que preside la asociación desde febrero de 2008 y al mes siguiente dirigió una carta al presidente del CGPJ, Carlos Dívar, para poner la entidad a su disposición y colaborar en los objetivos comunes, que eran "defender los derechos de la infancia".
Esa carta no fue contestada y por ello Serrano acudió posteriormente al despacho del vicepresidente del CGPJ, Fernando de Rosa, al que llevó toda la documentación de la asociación y reiteró la propuesta de colaboración.
"Además, Fernando de Rosa participó en las últimas jornadas celebradas por la asociación en Madrid en noviembre de 2009, por lo que decir que al Consejo se le había ocultado su existencia y mi presidencia es inaudito".
En varios momentos de su intervención dejó claro que se siente perseguido y "no sólo lo estoy pasando mal en el aspecto personal y profesional, sino también en el terreno familiar", dijo.
En su opinión, "pretenden amedrentar a los jueces, para que no sean críticos con la ley de violencia de género como lo soy yo".
Agregó que como lleva su juzgado "al día" han tardado "tantísimo tiempo en ver dónde podrían encontrar un fallo".
Aseguró que él defiende a las maltratadas "y en veinte años de trabajo en asuntos relacionados con la familia no han matado ni una sola mujer en el ejercicio de mi jurisdicción, algo que no puede decir el delegado del Gobierno contra la Violencia de Género, Miguel Lorente".
El juez fue recibido con aplausos a su entrada en el salón. Tras agradecer esa cariñosa acogida dijo que habían sido las asociaciones feministas y una consejera del Cabildo de Tenerife (en referencia a Cristina Valido) las que habían permitido que volviera a estar en Tenerife, "en aras de la libertad de expresión".
En este sentido, los organizadores manifestaron que habían invitado a todas las entidades feministas, pero que habían excusado su asistencia "por cuestión de agenda".
Recalcó que él lucha por acabar con el machismo, pero, en su opinión, "llamar feministas a este tipo de asociaciones es un insulto al feminismo por la igualdad", precisó Serrano, quien dijo que hay un feminismo "del resentimiento y del oportunismo que lucha por una nueva era de discriminación por razón de sexo basada en la ideología de género".
Entre el público se encontraban jueces tinerfeños y altos mandos de las Fuerzas de Seguridad del Estado.
Serrano hizo hincapié en que los jueces "no debemos estar formados en ninguna doctrina ni en ninguna ideología".
En su ponencia repasó lo que denominó "dogmas del feminismo".
Rebatió la necesidad de arbitrar normas de discriminación positiva para la mujer y aseguró que la ley "discrimina a las mujeres, porque antes estaban bajo la tutela marital y ahora pasan a la tutela del Estado". Defendió la igualdad de oportunidades y la custodia compartida como una fórmula de igualdad.
"Fui el primer juez, en 1999, que aplicó la orden de alejamiento para una mujer y unos hijos de un hombre maltratador y lo hice aplicando un articulo de la Constitución".
Defendió una ley que luche contra la violencia en el ámbito doméstico y recordó que existe maltrato también con los ancianos o con los niños, algo que no reconoce la ley de violencia de género.
También relató su experiencia con detenciones (de hombres) injustas, los suicidios por este motivo, las denuncias falsas o la alienación parental, "algo que sufren los niños que han sufrido el divorcio de sus padres".
Por último, señaló que Europa no ha querido adoptar la perspectiva de género de España, "porque es una aberración".
http://www.eldia.es/2010-06-19/SOCIEDAD/1-Espana-expedienta-jueces-criticos-politicamente-correcto.htm#4
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