El punto de encuentro familiar ya ha facilitado en tres años que más de un centenar de niños puedan ver sin problemas a sus progenitores y familiares
Asistentes al aniversario del punto de encuentro familiar de Avilés, ayer. ricardo solís
Teresa CEMBRANOS En el punto de encuentro familiar se abre una puerta a la esperanza para muchos niños: la de ver a sus padres y familiares sin problemas, sin discusiones. Y es que un piso de la calle La Cámara funciona desde hace tres años como nexo de unión entre los menores y aquellos progenitores que no tienen la custodia y que, por varios motivos, no han podido ver a los pequeños. Desde que abrió sus puertas, en 2008, ya ha atendido a más de un centenar de niños. El perfil es el de un menor de entre 3 y 8 años que vive con su madre y va a ver a su padre y es derivado desde el Juzgado de Primera Instancia de Avilés, aunque también llegan por petición del Principado o de Servicios Sociales. El tipo de visita más frecuente es lo que se denomina «entrega y recogida».
«Se garantiza el derecho de los niños a relacionarse con el progenitor no custodio pero también, los puntos de encuentro, sirven para que los niños que están en acogimiento vean a sus familias. La razón de esos centros es la de tener un lugar neutral y lo más normal es que las intervenciones sean temporales, hasta que los problemas de las familias se solventen», explicó Gloria Fernández, Directora del Instituto Asturiano de Atención Social de la Infancia y Adolescencia, que ayer visitó el PEF de Avilés.
La concejala de Servicios Sociales, Purificación García, se mostró satisfecha por el buen funcionamiento del punto de encuentro familiar: «Cada vez más familias utilizan este recurso para seguir manteniendo el contacto con sus hijos». García destacó cómo el Ayuntamiento decidió, sin apoyo incial del Principado, poner en marcha el centro. «Si nosotros no hubiéramos dado ese primer paso hoy (por ayer) no estaríamos aquí. El primer año sólo funcionó gracias al Ayuntamiento; el segundo ya entró el Principado a participar en la gestión», valoró la edil de IU.
Mariti Pereira, presidenta de Cavasym, la entidad que gestiona el centro, explicó que hay tres tipos de atenciones: la tutelada, la supervisada y de la entrega y recogida. En todos los casos interviene un equipo de profesionales formado por psicólogos, pedagogos, trabajadores sociales y educadores.
Desde el punto de encuentro familiar se ha impulsado la elaboración del cuento infantil «Martín en el PEF», realizado con la colaboración de alumnos en prácticas de Psicología Comunitaria de la Universidad de Oviedo. Las ilustraciones fueron hechas por niños que acuden al centro. «La importancia del libro es que sirve a los niños que vienen por primera vez al punto de encuentro y también a los padres», explicó Pereira. La idea es repartir los libros en centros educativos e instalaciones de Servicios Sociales.
http://www.lne.es/aviles/2011/02/22/puerta-convivencia/1036718.html
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