Los psiquiatras aseguran que la mujer sufre un trastorno de personalidad que no afecta sus capacidades cognitivas ni volitivas
Lunes, 19 de Diciembre, 2011
http://www.lavanguardia.com/local/madrid/20111219/54241269587/los-forenses-descartan-que-un-hombre-pudiera-clavarse-un-cuchillo-durante-una-discusion-con-su-parej.html?mid=55949Los médicos forenses del juicio que se celebra contra una acusada de asesinar a su pareja de dos puñaladas han descartado que la víctima pudiera clavarse el cuchillo en el transcurso de un forcejeo que mantuvo con su compañera sentimental, una versión que sostiene la procesada.
Un Jurado Popular de la Audiencia Provincial de Madrid enjuicia desde la pasada semana a María Mercedes J.M. por un delito de homicidio, que perpetró el 5 de junio de 2010 al asestar presuntamente dos puñaladas a su pareja.
En su declaración, la mujer aseguró que en el transcurso de una discusión cogió un cuchillo para defenderse y, al abalanzarse contra ella, se lo clavó él mismo, negando su autoría. Sin embargo, los forenses han descartado esta mañana que los hechos se hubieran producido de este modo.
Asimismo, han indicado que la procesada tuvo que limpiar los rastros de sangre de las heridas, ya que el cadáver no presentaba la sangre que debía tener a tenor de la profundidad de los cortes, que acabaron con su vida.
Por otro lado, las psiquiatras han indicado que la mujer sufre un trastorno de personalidad, si bien han recalcado que ello no le impide distinguir lo que está bien de lo que está mal. Así, han destacado que estaba en pleno uso de sus capacidades cognitivas y volitivas.
Según el escrito de acusación, la procesada mantenía una relación sentimental con Ramón S.G. desde 2006, y dos años después comenzaron a convivir juntos en una casa propiedad del hombre en la localidad de Getafe. El día 5 de junio de 2010, sobre las 20 horas, Ramón S. G. regresó al domicilio algo bebido y María Mercedes J. M. le recriminó por ello.
Acto seguido la procesada se dirigió a la cocina para coger un cuchillo y, aunque el hombre le agarró el brazo para intentar pararla, María Mercedes consiguió clavarle el cuchillo en el pecho, causándole una herida de un centímetro aunque fue la segunda puñalada que asestó la que provocó una herida mortal al seccionar la arteria aorta. El hombre consiguió llegar hasta el cuarto de baño, donde murió a causa de la última puñalada.
Tras la muerte de su pareja, María Mercedes desnudó, lavó y volvió a vestir con ropa limpia el cadáver. Acto seguido se deshizo de la ropa manchada de sangre y trasladó el cuerpo de Ramón S. G. hasta la terraza de la vivienda.
Ahí lo colocó en posición sedente sobre una caja de cartón y apoyado en la pared. El cadáver permaneció allí toda la noche y ya en la mañana siguiente, sobre las 08.18 horas, Mercedes avisó al Servicio de Emergencias 112 para que acudieran al domicilio.
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