Martes, 4 de Diciembre, 2012¿Por qué no disponemos siquiera de un recuento oficial de los neonatos muertos a manos o con la aquiescencia de sus madres?
Espinoso es poco. El tenebroso suceso del doble infanticidio en Pilas es inabordable desde una óptica desapasionada, con la curiosa frialdad del entomólogo que observa a la mantis religiosa decapitar a sus amantes. Hablamos de seres humanos, permítaseme la obviedad, dignos de tanta consideración como las 44 mujeres asesinadas conmemoradas esta semana con toda solemnidad. Pregunto con todo el respeto y sin el mínimo deseo de tocarle los ovarios a la mitad de la población mundial ni a la mínima parte de esa mitad que uno cuenta entre sus más allegados. ¿Por qué no disponemos siquiera de un recuento oficial de los neonatos muertos a manos o con la aquiescencia de sus madres? Sólo en Andalucía en los últimos dos meses, me asaltan cinco casos a la memoria. Aunque el crimen siempre casa mal con la estadística, hasta la más recalcitrante de las feministas (valga la redundancia) coincidirá en que tenemos un problema lo suficientemente relevante desde el prisma numérico como para que el Estado se ocupe. No con un ministerio, ni con una dirección general, ni con una ley ad hoc con su juzgado y su fiscalía propios, ni con un plan nacional, ni con una brigada especializada de la Policía , ni con diecisiete observatorios autonómicos, ni con millones de euros en campañas de concienciación… pero, joder, al menos con un funcionario dedicado a contabilizar la matanza para que los legisladores tomen medidas, si procede. Y aunque me tildes de machista irredento e incluso de demagogo, te seguiré queriendo.http://www.larazon.es/noticia/9886-con-perdon-por-lucas-haurie
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