Viernes 08 de julio de 2011
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Los padres de acogida abandonaron sensiblemente emocionados el juzgado tras concluir el juicio por el futuro de la niña
J.F. MESTRE. PALMA La fiscalía exigió ayer que Margarita, la niña de cuatro años que vive con sus padres de acogida, sea inmediatamente entregada por estos adultos al centro de acogida del Consell de Mallorca, ya que esta institución tiene la custodia de la menor. Esta petición se formuló ayer en el juicio que se celebró en el juzgado de sa Guerreria a petición de los padres de acogida. La pareja solicita que la menor siga con ellos mientras otro juzgado determina si debe ser entregada a su padre biológico, un ciudadano británico que ha pedido la custodia de su hija y que pretende irse con ella a su país.Al igual que ya ocurrió la pasada semana cuando los padres recibieron la orden de entregar a la menor al servicio de menores del Consell, un nutrido grupo de familiares y amigos de Silvia y Manuel se concentró ayer a las puertas del edificio judicial. El juicio se celebró a puerta cerrada al tratarse de un caso que afecta a un menor, por lo que estas personas no pudieron estar presentes en la vista. Entre las personas que acudieron ayer al juzgado estaba la madre biológica de la niña, que mostró su apoyo a los padres de acogida, ya que está en contra de que su hija sea entregada al padre biológico. La mujer, a la que le retiraron la custodia de la menor hace unos dos años, ha acusado a su antigua pareja de haberla agredido y de obligarla a que abortara al enterarse que estaba esperando una criatura, pero que ella se negó y siguió adelante con el embarazo. La madre no declaró, pero al terminar el juicio se marchó acompañada de los familiares de los padres de acogida de la pequeña Margarita.
El abogado Andrés Buades, que representa a los padres de acogida, intentó demostrar que, por el bien de la niña, lo más adecuado es que continúe con sus clientes mientras se resuelve la demanda contra la decisión de que sea entregada a su padre biológico. El letrado sostiene que esta entrega supondría un trauma para la niña, ya que apenas conoce a su progenitor de una decena de cortos encuentros, y el hombre tiene intención, y así lo ha dicho públicamente, de regresar a su país cuanto antes y llevarse a la niña con él.
El letrado topó con la postura contraria que mantiene, no solo la fiscalía, sino también el abogado que representa al Consell de Mallorca. La fiscal Rosario García Guillot recordó en la vista que existe una resolución adoptada por el Institut Mallorquí de Afers Socials, organismo que se hace cargo de la custodia de un menor en situación de desamparo. Aseguró que esta resolución tiene la misma fuerza que la sentencia de un juez. Los técnicos de este organismo público decidieron que lo mejor para Margarita es que fuera entregada a su padre biológico, que afirma que reclamó la custodia cuando se enteró que tenía una hija. Antes de que se adoptara esta decisión un juzgado de Palma comprobó, a través de un estudio de ADN, que este ciudadano británico era el progenitor biológico de la pequeña.
En la vista de oral celebrada ayer se escuchó el testimonio de varios técnicos. Dos de ellos son psicólogos del departamento de menores, que defendieron que lo más adecuado para un menor es que tenga la oportunidad de crecer junto a sus padres biológicos. Los psicólogos explicaron que en estos casos debe seguirse un protocolo para que la niña vaya conociendo poco a poco a su progenitor, y sostienen que esta situación no conlleva futuras secuelas psicológicas en la menor.
Igual opina la fiscal Rosario García Guillot, que consideró que no existía ningún motivo para que no se cumpliera la orden del departamento de Menores del Consell, que había ordenado a los padres de acogida que entregaran a la niña. La fiscalía sostuvo que el progenitor ha demostrado tener mucho interés en hacerse cargo de la educación de su hija, y que lo más adecuado es que se la entreguen. El fiscal no se opone a que este hombre pueda marcharse con su hija a su país de origen, con independencia de que la niña no conozca ni una sola palabra del idioma que se habla en Gran Bretaña.
Los padres de acogida entregaron ayer en el juicio el informe del detective privado de la empresa Record que mantiene que el progenitor es una persona con un pasado violento. La fiscalía no tuvo en cuenta la valoración de este informe.
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