Reunión de los lunes

Nos reunimos todos los lunes a las 20,30 horas en la C/Vinaroz nº31, entrada por C/Pradillo, MADRID ¡TE ESPERAMOS!

jueves, 28 de julio de 2011

La conflictividad familiar se dispara un 30% durante las vacaciones de verano

Problemas con el régimen de visitas y el aumento de la convivencia multiplican la cifra de parejas que demandan mediación
28.07.11 - ALMUDENA DOÑA admontalvo@lavozdigital.es | JEREZ
El trabajador social y la presidenta de Mediante supervisan
la sala de juegos donde los menores se encuentran con sus progenitores

EN NÚMEROS 300 son los usuarios que atiende Mediante, de los que el 80% tiene edades comprendidas  entre los 27 y los 38 años

«Se prohíbe hablar de pleitos y juzgados delante de los niños». Ésta es la frase que abandera el cartel de entrada de la sala de juegos de la asociación Mediante, especializada en servicios de mediación integral y atención a la familia. Una sentencia que deberían grabarse a fuego muchos progenitores, acompañada de otras del tipo «no hay que ejercer en ningún caso la violencia» o «por encima de todo está el bienestar de los hijos».
Reflexiones que deberían resultar de cajón aún no han sido asimiladas por muchos padres, que acaban siendo atendidos por este centro que no solo presta apoyo psicológico y asesoramiento legal, sino que también sirve de punto de encuentro para casos de extrema complejidad en los que los cónyuges separados no logran ponerse de acuerdo sobre la custodia o el régimen de visitas.
La época estival es especialmente complicada en este sentido o al menos así lo avalan los números, que apuntan a que durante el verano la conflictividad familiar se dispara un 30%. La presidenta de la asociación, Josefina Benítez, cuya cifra de usuarios está fijada en 300, confirma que las atenciones en este sentido se multiplican durante estos meses, coincidiendo con el régimen de visitas de los niños en vacaciones que crea numerosas rencillas entre las parejas divorciadas. Junto a ello, en verano es cuando aumentan también las fricciones entre muchos otros matrimonios afectados de lleno por la crisis, a los que ahogan los problemas económicos y cuyas horas de convivencia se incrementan en proporción a la falta de entendimiento.
Resolución pacífica y neutral
«Ahora están demandando mucha mediación familiar y muchas terapias de pareja, así como la utilización del punto de encuentro -informa Benítez-. Estamos luchando para que este tipo de servicio vaya calando como la forma más efectiva de resolver los conflictos de manera pacífica». La mediación se utiliza para que los miembros de la familia consigan solucionar los problemas de manera satisfactoria a través de la ayuda de una tercera persona imparcial, antes de entrara en la vía judicial.
En lo que se refiere al punto de encuentro, la asociación ofrece su sede como lugar neutral para la entrega y recogida de niños o el desarrollo de la visita en el propio centro, en el supuesto de que existan tensiones a la hora de cumplir el régimen de visitas. Otros servicios complementarios son la orientación familiar y terapia de pareja; la asesoría jurídica; la escuela de padres y madres separados; los talleres infantiles y para mujeres y los grupos de ayuda mutua, todo ello dirigido por un equipo formado por una abogada, una mediadora, un trabajador social, una psicóloga y una educadora social.
Como explicó la presidenta, la asociación está en permanente contacto con colectivos como la Asociación de Mujeres Unidas Contra la Violencia y cuenta con el apoyo inestimable de los juzgados de Violencia de Género y Familia, que son los que les derivan a los usuarios en la inmensa mayoría de los casos. Desafortunadamente, lamenta que aún no haya demasiada concienciación sobre este servicio. «Solo un 20% de los abogados utiliza la mediación. En Estados Unidos o en el norte de Europa enseguida optan por este servicio, tanto los ciudadanos como los profesionales del sector deberían apostar por ella como una herramienta esencial».
Juventud de los usuarios
Otra de las cuestiones sobre las que la presidenta hizo hincapié fue la juventud de la mayoría de las parejas que acuden a Mediante, de las que el 80% tiene edades comprendidas entre los 27 y los 38 años. Algo que resulta llamativo si se presupone que las nuevas generaciones han de estar más concienciadas contra lacras como la violencia de género o a favor de una convivencia pacífica en beneficio de los hijos.
«Nos puede parecer que hoy en día hay más diálogo, pero no es así. A la menor, las parejas entran en peleas por dinero o por los hijos que acaban en denuncia. En la juventud todavía no han calado valores como la paz y el diálogo, habrá que hacer un examen de conciencia y preguntarse por qué ya no son capaces de convivir». Para ello, una de las claves fundamentales es la de la formación, como subrayó el trabajador social Juan Carlos Nieto. En este sentido, Mediante oferta cursos a colectivos diversos, colegios profesionales y a la propia universidad, con el fin de fomentar «la cultura del acuerdo» y que el día de mañana sean muchos más los que opten por esta forma pacífica y segura de resolver los conflictos familiares.

No hay comentarios: