Viernes, 27 de Enero, 2012
La foto procede del enlace relacionado con la noticia:
- Detenida una pareja que encerró en casa a su hija de 4 años para irse de copas
"Estoy triste y tengo miedo. No quiero estar sola". La autora de la frase es una niña de 9 años, que vivía en el barrio de Buztintxuri de Pamplona, y la situación de angustia que le sobrecogía no era otra que la soledad a la que le había acostumbrado su madre cuando se marchaba a trabajar. La menor se quedaba sola en casa, con el móvil y las llaves, y en esa ansiedad permanecía hasta la noche. Así ocurrió al menos el 21 de agosto de 2010. Ese día, la niña jugaba con otros chavales de su edad, pero al retirarse estos a sus domicilios para cenar y dormir, ella sintió el temor de quedarse sola. Confió su desasosiego a uno de los niños con los que compartía juegos, y este la subió a su casa. Desde allí sus padres alertaron a un tío de la niña y a la policía al filo de la medianoche. Los agentes intervinientes, que declararon ayer en el juicio por el que la fiscal pide para la madre 14 meses de prisión por abandono temporal de menores, dijeron que "la niña comentó que era habitual que su madre la dejara sola con las llaves de casa. No fue algo aislado. Ese día la niña llevaba sola desde las siete de la tarde hasta las doce de la noche".http://www.noticiasdenavarra.com/2012/01/27/sociedad/navarra/piden-14-meses-de-carcel-para-una-madre-que-dejo-de-noche-sola-en-casa-a-su-hija-de-9-anos
nO ASISTIÓ AL JUICIO La madre, a la que le fue retirada la guarda y custodia de la hija en un juzgado civil, no asistió al juicio, pero pese a su ausencia el juez de lo Penal nº 2 decidió celebrar la vista al habérsele notificado el acto. En su declaración policial la imputada ofreció varias contradicciones y, en su versión final, afirmó que había dejado a la niña con un vecino hasta que regresara de trabajar (de un bar cercano). Sin embargo, el vecino cuyo hijo jugaba con la niña desmintió que estuviera al cargo de ella, afirmó que a la madre ni la conocía y que esa noche fue la primera vez que subió a su casa.
El tío de la menor, que la recogió aquella noche de casa del vecino, afirmó en el juicio que no le extrañó la situación de abandono "porque era normal que la madre dejara a la niña sola, sabíamos que lo había hecho en otras ocasiones". Dijo que cuando la madre fue a recoger a la niña "no quise ni hablar con ella".
La fiscal concluyó que abandonar así a una menor puede generar situaciones de mucho peligro para la niña y la acusación particular, que ejerce el padre de la niña, añadió que la acusada "dejó a la pequeña sin custodia ni vigilancia. Esto ha afectado al desarrollo de la menor y concurre aquí una actuación negligente con una voluntad de incumplir obligaciones". La defensa pidió la absolución porque "no existe la figura delictiva. Puede haber una madre desatenta, que ya ha sido juzgada en el Derecho Civil, donde le ha sido retirada la custodia por su conducta inadecuada. Pero hay que ver si esta conducta es tan intensa como para que exista delito. No quería poner la integridad de su hija en peligro, pero no tenía otra posibilidad que dejarla sola al irse a trabajar".
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