Domingo, 10 de Enero, 2016
Llegamos a este mundo gracias a un padre y a una madre, y eso es precisamente lo que la industria de género quiere conseguir que olvidemos. Nuestras existencia depende en gran parte del cariño y afecta que hayamos recibido en nuestra niñez. Niños que se han sentido queridos por sus padres, que han creído ser el centro de atención de su padre y su madre, serán adultos que gocen en su futuro de una gran autoestima, y confianza en si mismos.
Por contra tenemos hoy día una sociedad que no solo favorece las ruptura de la familia, sino que además, facilita que el padre se aleje de la vida de los hijos, pasando en los mejores casos a ocupar un puesto de visitante más, y en otros de forma muy lamentable nuestro sistema judicial, quienes administran justicia, y en dichos procesos intervienen (y no solo jueces y magistrados, tenemos también un Ministerio Fiscal, y un equipo psicosocial), colaboran con su pasividad en los casos en donde el padre termina despareciendo de la vida de los menores, y no son pocos los casos de menores que crecen creyendo que sus padres les abandonaron, que no les quieren, que fue más importante para ellos su nueva mujer en su vida, u otros nuevos hijos, u otra serie de circunstancias que llevan a los menores a creer que son niños abandonados, o despreciados por su figura paterna.
La manipulación parental no es exclusiva de un sexo, por mucho que los casos en donde la madre ocupe el papel de quien en contra coloca a los hijos del otro progenitor, pero si hay un elemento común como causa de este grave maltrato infantil, y es el sistema judicial, y los políticas, que juegan al interés del feminismo evitando crear leyes que eviten en lo posible este grave maltrato infantil contra los menores.
Fuente:
http://despiertavivimosenunamentira.com/amor-del-padre-personalidad-humana/
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