El motivo de la queja no es otro que el de que no se dictan las órdenes de protección que ellas pretenden, y que el número de denuncias que terminan en condena son la menos, pues si bien tienen bastante acotada la línea de la acusación por denuncia falsa contra la falsa denunciantes, la mayor parte de los casos termina en archivo o sobreseimiento, con el lo cual el número de hombres condenados no es el que ellas desean. Su objetivo hay que tenerlo muy presente, pues es condenar y encerrar al mayor número posible de hombres, así como alejar a los hijos de su lado.
La estrategia que están llevando a cabo con esta manifestaciones es sencilla, su pretensión es la de que la mujer no pueda entrar en contradicción, y solo declare una vez en un entorno que es dirigido por los agentes del feminismo, y éste se sitúa en los Servicios Sociales, a través de los cuales tanto psicólogas como trabajadores sociales, van a redactar y expresar sus declaraciones conforme a que no pueda interpretarse de otra forma por los jueces que de cara a la condena sobre los varones. Así también obtendrían de forma directa e inmediata los beneficios que reporta la denuncia por violencia de género, ya que no son pocos los casos en donde el objetivo de ésta no es más que otro que el de acceder a esas ayudas que se dispensan por la denuncia. Una vez que palpan estas ayudas ya es más difícil para la mujer retractarse de una mentira, ya está comprada por el sistema.
Fuente:
http://www.publico.es/sociedad/victimas-violencia-machista-atreven-denunciar.html
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