Lunes, 04 de Julio de 2011
Con los rostros ensangrentados entraron al Servicio Médico Legal de Chillán, Carlos Acevedo Cifuentes y Segundo Muñoz para el cumplimiento del peritaje de ADN, que se practicó a Acevedo, a Viviana Muñoz (hermana de Segundo) y a “Carlitos”, niño de 8 años cuya paternidad no ha sido aclarada, para terminar con una pugna que se viene prolongando desde enero de este año, cuando el Tribunal de Familia de Chillán le entregó la custodia a la madre del menor, pese a que el niño había sido criado desde los ocho meses de vida por su abuela paterna, María Cifuentes.
Minutos antes, cuando llegaban los Muñoz, se produjo una violenta riña, en que ambos hombres se golpearon la cara a puños y rodaron por el suelo. También entraron en la gresca, en el frontis del recinto ubicado en Avenida O´Higgins, un hermano y una hermana de Acevedo y el hermano y la cuñada de Viviana Muñoz.
En el intertanto una de las mujeres sacó a Carlitos, que lloraba sin entender qué sucedía y lo ingresó al recinto, donde fue objeto de apoyo sicológico para superar el estado de “shock”. El niño al entrar se veía claramente perturbado por la presión que sobre él estaban ejerciendo los adultos.
Una unidad policial que pasaba por el sector terminó de poner orden y luego se procedió a la toma de muestras de ADN a la madre, el niño y el supuesto padre.
Por primera vez desde que se conoce este caso hubo acceso a hablar con la familia de Viviana Muñoz, a través de su hermano Segundo y de su cuñada, que es la abogada Lesliet Riquelme. Ellos desmintieron la versión que ha circulado sobre una supuesta herencia de un ciudadano mexicano a nombre del cual está inscrito en los registros el menor ( el supuesto padre, aseguran, estuvo en los equipos profesionales extranjeros de Tribasa que construyeron la carretera concesionada), que sería el argumento que esgrime la contraparte para pedir la custodia del menor.
En este caso también ha intervenido el senador Alejandro Navarro y la organización “Amor de Papá”, a los cuales la abogada y tía política de Carlitos, señaló que iba a emplazar una vez que se llegue a una verdad jurídica, porque si bien explicó, entiende que la justicia chilena muestra una desigualdad en los derechos de los padres, eso no da pie para denigrar a otras personas utilizando las instituciones que representan.
Ambas familias acusan haber sido objeto de amenazas y que no hay un ambiente de tranquilidad ni preocupación por el niño, quien está siendo expuesto a situaciones indebidas.
También las dos familias señalan que la contraparte se negaba, hasta aquí, a la realización de la prueba de ADN, pero este aspecto ayer quedó zanjado y ahora el resultado del peritaje será la última palabra en este caso, en unos 90 días que es lo que demoraría el resultado.
Por motivo de la riña, sólo quedó privado de libertad Segundo Muñoz, ya que Carlos Acevedo habría tenido lesiones mayores, según confirmó ayer tarde el mismo Muñoz. Los otros involucrados quedaron citados al juzgado respectivo.
Minutos antes, cuando llegaban los Muñoz, se produjo una violenta riña, en que ambos hombres se golpearon la cara a puños y rodaron por el suelo. También entraron en la gresca, en el frontis del recinto ubicado en Avenida O´Higgins, un hermano y una hermana de Acevedo y el hermano y la cuñada de Viviana Muñoz.
En el intertanto una de las mujeres sacó a Carlitos, que lloraba sin entender qué sucedía y lo ingresó al recinto, donde fue objeto de apoyo sicológico para superar el estado de “shock”. El niño al entrar se veía claramente perturbado por la presión que sobre él estaban ejerciendo los adultos.
Una unidad policial que pasaba por el sector terminó de poner orden y luego se procedió a la toma de muestras de ADN a la madre, el niño y el supuesto padre.
Por primera vez desde que se conoce este caso hubo acceso a hablar con la familia de Viviana Muñoz, a través de su hermano Segundo y de su cuñada, que es la abogada Lesliet Riquelme. Ellos desmintieron la versión que ha circulado sobre una supuesta herencia de un ciudadano mexicano a nombre del cual está inscrito en los registros el menor ( el supuesto padre, aseguran, estuvo en los equipos profesionales extranjeros de Tribasa que construyeron la carretera concesionada), que sería el argumento que esgrime la contraparte para pedir la custodia del menor.
En este caso también ha intervenido el senador Alejandro Navarro y la organización “Amor de Papá”, a los cuales la abogada y tía política de Carlitos, señaló que iba a emplazar una vez que se llegue a una verdad jurídica, porque si bien explicó, entiende que la justicia chilena muestra una desigualdad en los derechos de los padres, eso no da pie para denigrar a otras personas utilizando las instituciones que representan.
Ambas familias acusan haber sido objeto de amenazas y que no hay un ambiente de tranquilidad ni preocupación por el niño, quien está siendo expuesto a situaciones indebidas.
También las dos familias señalan que la contraparte se negaba, hasta aquí, a la realización de la prueba de ADN, pero este aspecto ayer quedó zanjado y ahora el resultado del peritaje será la última palabra en este caso, en unos 90 días que es lo que demoraría el resultado.
Por motivo de la riña, sólo quedó privado de libertad Segundo Muñoz, ya que Carlos Acevedo habría tenido lesiones mayores, según confirmó ayer tarde el mismo Muñoz. Los otros involucrados quedaron citados al juzgado respectivo.
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