«Los hijos no deben ser moneda de cambio en una separación»

El gabinete de mediación Arcaduz asiste a un centenar de parejas de toda la provincia al año.
29.08.09 - E. M.
Cada vez son más las parejas que tienen que recurrir a un servicio de mediación familiar para llegar a un acuerdo sobre los hijos. La asociación Arcaduz es la única de la provincia que cuenta con financiación pública para atender a los matrimonios que lo precisen. La situación promete cambiar en poco menos de un mes con la puesta en vigor de la nueva ley de Mediación Familiar, que contempla la creación de un registro de profesionales a los que acudir y una mayor protección sobre los más vulnerables.

La mitad de las demandas se resuelve en poco más de seis mesesLa nueva Ley de Mediación contempla un registro de profesionales

Cada vez son más las parejas que tienen que recurrir a un servicio de mediación familiar para llegar a un acuerdo sobre los hijos. La asociación Arcaduz es la única de la provincia que cuenta con financiación pública para atender a los matrimonios que lo precisen. La situación promete cambiar en poco menos de un mes con la puesta en vigor de la nueva ley de Mediación Familiar, que contempla la creación de un registro de profesionales a los que acudir y una mayor protección sobre los más vulnerables.


Ana Campos, presidenta del gabinete, asegura que a lo largo de estos años los acuerdos han cambiado, así como el perfil de las parejas que acuden a estos dispositivos. «Confiamos en que la nueva norma vaya a mejorar la situación de las familias que se enfrentan a estos procesos», asegura al respecto.

En los siete años que lleva prestando asistencia ha visto de todo. Desde padres que no pueden hablar sin discutir hasta custodias compartidas durante años de las de quince días en cada casa. «Cada pareja tiene que buscar la fórmula más adecuada a su situación y, sobre todo, nunca se puede utilizar a los hijos como moneda de cambio en una separación», insiste la mediadora.

Según su experiencia, «el asesoramiento profesional permite que las partes se pongan de acuerdo y generen salidas viables para solucionar el problema». Recurrir a la justicia conlleva, en muchos casos, medidas impuestas y un mayor coste.

Comunicación

También han visto con parejas que aún no han comunicado a sus hijos la decisión de separarse y les preocupa qué decir, por lo que se les ofrece un espacio de diálogo lejos del domicilio que amortigua el golpe.

Este servicio no sólo se centra en la atención en los profesos de divorcio, sino que asesora a hijos que no saben qué hacer con sus padres ya mayores o la visita de abuelos que tienen problemas para ver a sus nietos tras la separación de los padres.
http://www.lavozdigital.es/cadiz/20090829/ciudadanos/hijos-deben-moneda-cambio-20090829.html