QUITO
Pese al esfuerzo de miembros del Cuerpo de Bomberos, el pequeño Israel, de un año, falleció la noche del jueves pasado en el sector de Conocoto, suroriente de la ciudad, a causa de los golpes que recibió, aparentemente de su padrastro.
La voz de alerta de que un niño estaba agonizando la habría recibido el cuartel del Cuerpo de Bomberos de Conocoto, cerca de las 21:45 del jueves.
Al trasladarse en busca del barrio El Paraíso, en Conocoto Alto, los socorristas se encontraron con un automóvil que llevaba al niño; en ese mismo sitio los paramédicos le dieron los primeros auxilios sin tener resultados positivos.
Verónica Aráuz, dueña de una tienda en el sector, comentó a las autoridades que quien bajó con el niño en brazos fue el padrastro del pequeño y le siguió Ruth Estefanía Procel Caiza, de 22 años, su madre.
“Él (padrastro) gritaba que le den auxilio y ella (madre) lloraba mucho. Cuando los bomberos le brindaron ayuda no pudieron hacer nada ya que estaba el niño muerto”, contó Aráuz.
El padrastro habría manifestado que iba a buscar una chaqueta y huyó del lugar sin dejar rastro.
Al revisar el cuerpo del infante se descubrió que presentaba huellas de golpes en el cuerpo. Algunos ya habían cicatrizado, mientras que otros eran recientes. “Había moretones que posiblemente fueron hechos recientemente con una correa”, dijo uno de los socorristas.
La causa del fallecimiento fue una hemorragia por edema cerebral, que fue originada por el maltrato físico, se informó.
Al interrogar a la madre sobre el hecho, manifestó que su conviviente ocasionó la muerte del niño.
Explicó que el hombre le aplastó por varias ocasiones el estómago a su hijo hasta dejarlo sin aire y además lo golpeó en todo el cuerpo fuertemente.
La mujer fue llevada hasta la Policía Judicial para investigaciones, mientras se inició un operativo para capturar al padrastro, supuesto causante del deceso.
El cadáver del pequeño permanecía hasta la mañana de ayer en la morgue de la Policía Nacional.
http://www.eluniverso.com/2011/07/16/1/1422/murio-aparentemente-maltratos.html?p=1354&m=719La voz de alerta de que un niño estaba agonizando la habría recibido el cuartel del Cuerpo de Bomberos de Conocoto, cerca de las 21:45 del jueves.
Al trasladarse en busca del barrio El Paraíso, en Conocoto Alto, los socorristas se encontraron con un automóvil que llevaba al niño; en ese mismo sitio los paramédicos le dieron los primeros auxilios sin tener resultados positivos.
Verónica Aráuz, dueña de una tienda en el sector, comentó a las autoridades que quien bajó con el niño en brazos fue el padrastro del pequeño y le siguió Ruth Estefanía Procel Caiza, de 22 años, su madre.
“Él (padrastro) gritaba que le den auxilio y ella (madre) lloraba mucho. Cuando los bomberos le brindaron ayuda no pudieron hacer nada ya que estaba el niño muerto”, contó Aráuz.
El padrastro habría manifestado que iba a buscar una chaqueta y huyó del lugar sin dejar rastro.
Al revisar el cuerpo del infante se descubrió que presentaba huellas de golpes en el cuerpo. Algunos ya habían cicatrizado, mientras que otros eran recientes. “Había moretones que posiblemente fueron hechos recientemente con una correa”, dijo uno de los socorristas.
La causa del fallecimiento fue una hemorragia por edema cerebral, que fue originada por el maltrato físico, se informó.
Al interrogar a la madre sobre el hecho, manifestó que su conviviente ocasionó la muerte del niño.
Explicó que el hombre le aplastó por varias ocasiones el estómago a su hijo hasta dejarlo sin aire y además lo golpeó en todo el cuerpo fuertemente.
La mujer fue llevada hasta la Policía Judicial para investigaciones, mientras se inició un operativo para capturar al padrastro, supuesto causante del deceso.
El cadáver del pequeño permanecía hasta la mañana de ayer en la morgue de la Policía Nacional.
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