Por Ana Burrieza.http://www.diarioelaguijon.com/noticia/217/DENUNCIA-CIUDADANA/mujer-maltratada-denuncia-funcionamiento-justicia-ampara-falsas-denuncias-aut%C3%A9nticas-v%C3%ADctimas.html
Por contradicciones entre varios juzgados, continúa en la calle mientras sigue amenazando con matar a su víctima.Ana Burrieza.23.01.12. Si no fuera porque Ana Cabanes va a todas partes con una maletita con más de 2000 folios de sentencias y autos judiciales que explican su calvario, nadie la creería. Cuando Ana Cabanes conoció a José Luis López Pericás no imaginaba ni por asomo que ese hombre del que se enamoró la iba a destrozar la vida, ni quién se ocultaba realmente tras una apariencia de pudiente hombre de negocios con casas en las exclusivas urbanizaciones de La Moraleja y Sotogrande en Cádiz, con barco propio y vacaciones en Marbella y el extranjero. Una apariencia tras la que se ocultaba una historia que Ana desconocía. Cuando Ana comenzó a ver comportamientos obsesivos y agresivos de su expareja quiso dejar la relación, algo a lo que este correspondió con violencia en numerosas ocasiones. Hasta que un día y pese a que tenía una orden de alejamiento por pegarla anteriormente tal y como reconoce la sentencia del Juzgado de lo Penal 16 de Madrid a la que este diario ha tenido acceso , se presentó en casa de Ana, armado de una escopeta del calibre 12, la agredió física y sexualmente, y ante la llegada de la Policía Nacional se atrincheró con el arma municionada en el piso, quien finalmente logró desarmarle tras más de seis horas de asedio, con negociador incluído como si de una película se tratase.
Inexplicablemente para Ana el titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer nº 8 de Madrid, Francisco Javier Pérez-Olleros Sánchez-Bordona, lo puso en libertad a las 24 horas, no sin antes adelantar un día y medio las comparecencias y sin avisar a las partes, algo que fuentes jurídicas consultadas por Diario El Aguijón consideran cuando menos irregular, y pese a que tenía una orden de alejamiento anterior.
FALLOS CONTINUOS DEL SISTEMA DE JUSTICIA Y FUERTES PRESIONES
José Luis Pericas no era un desconocido para la Justicia ni para los medios de comunicación. Anteriormente a conocer a Ana Cabanes, el nombre de José Luis López Pericas aparece vinculado a mediados de los años 90 junto al de su padre, al famoso Caso Ibercorp-Mariano Rubio protagonista de uno de los mayores casos de corrupción de la historia.
Para Ana, una de las explicaciones lógicas al desbarajuste de su caso y las contradicciones, reside en la decisiva actuación del padre del acusado y defensor de su agresor, el prestigioso abogado madrileño José Luis López Sánchez, fundador del despacho Melchor de las Heras quien, tras el escándalo Ibercorp, cambió su nombre en 2002 por el actual de CMS Albiñana&Suárez de Lezo. Fuentes sindicales de la administración de Justicia conocedoras del asunto han confirmado a Diario El Aguijón, que las presiones de López Sánchez y denunciadas por Ana Cabanes a nuestro diario, han influido notablemente en un caso “complejo”, “que ningún juzgado de Plaza de Castilla quiere, e incluso hubo una compañera que pidió el traslado por la presión de tener todos los días al abogado de la defensa plantándose en el juzgado y fiscalizando cada paso que se daba, cuando todos reconocemos que Ana lleva la razón”.
Tras esas presiones denunciadas por Ana Cabanes y que fuentes sindicales de la administración de justicia también confirman, estaría el hecho de que la juez instructora María Gracia Parera mediante un auto aclaratorio, sin petición de parte, y fuera de los plazos establecidos, modificó un aspecto sustancial del proceso, anulando la agresión sexual, consumada bajo intimidación de arma cargada que avalan más de 40 policías, impidiendo así, que se juzgara al acusado en la Audiencia Provincial. Por ese auto, y pese a que se trataba de un claro caso competencial de la Audiencia Provincial, el asunto quedó en el Juzgado de lo Penal, 16, que le condenó en diciembre de 2009 a menos de 4 años de prisión, cuando los cargos no hubieran bajado de los once en la Audiencia Provincial. Tantas y tan claras fueron las irregularidades observadas durante el procedimiento, que la propia Audiencia Provincial anuló el 22 de febrero de 2010 la sentencia, una celeridad desconocida en la justicia española y que tiene su base según los juristas consultados en la claridad del asunto. En ese limbo jurídico existente entre anulaciones de sentencias, José Luis López Pericás sale a la calle, y de nuevo la vida de su víctima corre peligro.
Uno de los abogados de Ana Cabanes, Juan Untoria nos explicó que “es un complejo y continúo caso de violencia de género”, y que claramente, es un caso injusticia. La propia Sentencia de la Audiencia Provincial dice que la mala praxis de tres magistrados distintos, ha colocado a esta señora en total indefensión ante la justicia. No hace falta ser muy listo, para darse cuenta de quién es el sujeto, tiene casas en diversos lugares, además dirige una de las empresas de la familia. Proviene de una familia con dinero y con poder, simplemente”.
“Es increíble esta situación. Ni la propia juez lo puso en libertad. Es la orden de alejamiento más grande que hay en España. Le han mandado a vivir a Sotogrande, se tiene que presentar en San Roque de Cádiz todos los lunes a firmar, y no puede entrar en la Ciudad de Madrid. Pero la verdadera situación que todo el día está en la Moraleja, por que hay otro magistrado, que dice que el que tenga que vivir Sotogrande, no quiere decir, que no pueda circular por el resto del territorio nacional” añadió Untoria.
CON UNA MUERTE A SUS ESPALDAS
José Luis López Pericás no era un desconocido para la justicia ni para los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, algo que su víctima desconocía hasta que comenzó a indagar en su pasado. En junio de 1996 mató atropellando con su coche a Jacinto Jerez Pérez en la carretera que une Navacerrada con El Boalo en Madrid, al que embistió y arrastró durante 50 metros, tras haberle recriminado la víctima una peligrosa maniobra varios kilómetros atrás. Se dio a la fuga y se entregó cuatro horas más tarde.
En aquella ocasión, igual que en esta, y pese a la existencia de un muerto de por medio, José Luis López Pericás, salió libre al cabo de unas horas, y jamás entró en prisión por este caso. La familia del fallecido, también tuvo que acudir a los medios de comunicación para intentar desatascar la maraña jurídica en la que el asunto se vio envuelto por los grandes conocimientos jurídicos de la defensa del imputado. Tras levantar el asunto un notable revuelo, ambas partes alcanzaron un acuerdo para que, pese a las aplastantes pruebas, no fuera condenado por asesinato, sino por homicidio, con lo que se salvó de ir a la cárcel.
PELIGRO DE MUERTE REAL
Ana Cabanes no entiende la disparidad de la justicia, porque “mientras tengo que alabar la actuación de la Audiencia Provincial que se portó profesionalmente, el calvario que estoy pasando en los otros juzgados se hace increíble para quien no lo pase”, nos dice. El problema, es que no se trata de un caso con una posibilidad remota de que acabe mal, ya que el agresor pasa la mayor parte del día en La Moraleja pese a la orden de alejamiento que le tendría que situar en Cádiaz, mientras que Ana vive en la zona norte de Madrid, por lo que teme que “en una de estas en las que se quita la pulsera y tarda veinte minutos en ponérsela, se presenta en mi casa y me mata, como va por ahí diciendo y entonces todos hablarán pero ahora nadie hace nada para impedirlo”. Y es que en los últimos meses José Luis López Pericás se ha quitado la pulsera de localización GPS, o sobrepasado los límites de la ciudad de Madrid a la que no puede entrar hasta en 10 ocasiones, algo por lo que habitualmente la mayoría de los maltratadores vuelven a la prisión a la primera ocasión, pero que en este caso no es así, por la oposición inexplicable para la víctima de la Juez de Violencia de Género nº3 de Madrid Maria Luisa Alvarez-Castellanos Villanueva, que desde noviembre de 2011 no ha dictado el auto sobre el incumplimiento de las medidas cautelares, impidiendo de esa forma una posible apelación en reforma de la Audiencia Provincial.
Ana Cabanes siente en sus propias carnes que la justicia española no funciona bien, y que con dinero y algunas relaciones, la justicia no es igual para todos. “Yo lo que veo es que si una mujer se inventa malos tratos como hay muchas, y hace mucho teatro y el marido no tiene medios, acaba al día siguiente en la cárcel y tarda mucho más en salir que en este caso, y eso demuestra que algo no funciona nada bien en este país”. La última noticia de José Luis López Pericás nos la da la prensa que le sitúa envuelto en operaciones de compra venta de jugadores del Betis de blanqueo de dinero investigadas por la Guardia Civil. “Algo, que para alguien que ha matado y que ha demostrado que con dinero se puede hacer casi cualquier cosa, es pecata minuta”, nos dice la víctima.
Reunión de los lunes
martes, 24 de enero de 2012
Una mujer maltratada denuncia el funcionamiento de la justicia que ampara más las falsas denuncias que a las auténticas víctimas
Martes, 24 de Enero, 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario