"El dicho que cuanto más conozco a la gente, más quiero a mi perro delata ostracismo y aislamiento intelectual"
Luis Aleu, veterinario, impulsor en Navarra de la Sociedad de Hijos Separados. J. SESMA
POR GABRIEL ASENJO
Domingo, 10 de octubre de 2010
Preside la Asociación de Hijos Separados, una de las dos existentes en España, afirma. Padre de dos hijas, está divorciado. No entiende a quienes tienen animales en casa, como las víboras, "que para vivir deben comer a otros animales vivos" ni tampoco entiende que en casos de divorcio apenas se otorgue la custodia compartida. Opina que "el ermitaño y el huraño se pierden muchas oportunidades", por ello cree en la convivencia en pareja "y tengo pareja".
¿El animal defrauda menos que la persona? Son dimensiones diferentes. Prefiero una relación entre personas. El dicho que cuanto más conozco a la gente más quiero a mi perro indica ostracismo y aislamiento intelectual. No hay mejor desarrollo que la compañía con otro humano con el que tengas sintonía.
Decimos qué vida perra, día de perros... ¿A qué se debe?
Antes se trataba a los perros a patadas. Hoy ya me gustaría vivir como algún perro, aunque en la protectora de animales hay perros rescatados de una vida perra.
Pues algunas mascotas de millonarios viven de escándalo...
En París me tocó ver perros con uñas pintadas y con collarines con diamantitos. Esa parafernalia no va con los animales.
¿Qué mascota tiene?
Un loro.
¿Y le hace confidencias?
Es muy atento cuando uno le habla, y tiene la virtud de contestar lo que le parece.
Crío un tigre en su piso. ¿Una locura?
Me lo dejó el circo en San Fermín del 97 porque estaba enfermo y con el compromiso de llevárselo a los tres meses. Se llamaba Michi. Tenía 15 días . El circo se desentendió. Lo crié en casa y tuve que hacerle los papeles. Lo saqué cuando me empezó a romper las sillas. Lo entregué con 18 meses y 130 kilos a un alemán en Palma de Mallorca con la condición de que no viviese enjaulado.
De comer le habría costado una pasta...
Vivía en la Chantrea y el carnicero me daba los esqueletos de corderos. Comía cinco kilos de carne más el pienso. Era muy querido en el vecindario. Fue didáctico para mis hijas.
¿Qué nos enseñan los animales?
Los sociables, a vivir en sociedad. Los tigres viven en solitario y los leones en comunidad. El león es machista, la que trabaja es la hembra.
¿Un buen ejemplo?
Para fidelidad, los pingüinos; tienen siempre la misma pareja.
¿Hombre y mujer, nos aguantamos poco en pareja o aguantamos demasiado?
Antes se aguantaba más porque había menos libertad para separarte de lo que te hace daño. Hoy abundan relaciones sin cabeza, pasionales y son efímeras.
¿Qué sabe del amor?
Que es un sentimiento temporal que cuando está hay que aprovecharlo. Y cuando desaparece, acomodarlo. No es eterno. La lealtad se aproxima al amor.
¿La hipoteca une más que el amor?
Crea conflictos cuando no se puede pagar. Y cuando se puede pagar lo que tiene importancia es el nido.
¿Contigo pan y cebolla, un cuento chino?
En el amor pasional, no. Donde no vale es en el amor racional. Hoy el pan y cebolla es el piso, el coche y la comida.
¿Qué pide su asociación?
Custodia compartida preferente. Que el hijo o hija conserven el derecho a ser criados por papá y mamá . Liquidación de bienes cuando son motivo de conflicto.
Compartir por turnos el domicilio, pero si el padre limpia menos, repone menos la despensa, no sabe poner la lavadora...
Si no sabe, que aprenda. Como todo, en general, se las arregla, al igual que la madre cambiando un enchufe.
¿Los jueces entregan la custodia a la madre porque los hombres no son de fiar?
No. La entregan por cultura jurídica. No se complican la vida. No se les evalúa por las soluciones que aportan a la familia. Hay decisiones que agravan la situación de los hijos.
Muchas mujeres preferirían tener a los hijos sólo el fin de semana para que los varones sepan lo que vale un peine...
La custodia monoparental es una reivindicación machista. Lo que hace es descargar su responsabilidad como padre. En el mejor de los casos paga un dinero.
¿Un ejemplo ideal?
Custodia compartida de común acuerdo. Ambos progenitores reparten equitativamente la crianza de sus hijos. Ante una familia a la que le va mal económicamente el juez no le dice al banco que hay menores y que no se les puede quitar el piso. O se lo queda la mujer y la otra parte lo debe seguir pagando mientras se alquila una habitación, con lo cual no va a reunir las condiciones necesarias para criar a sus hijos.
Disculpe, pero los argentinos recuerdan el verbo largo de Vargas Losa.
Siempre fue signo de distinción hablar correctamente, aunque no tuvieses dinero. Creo que la melancolía del inmigrante también influyó para que, por medio de la palabra, salieran los recuerdos de lo dejado atrás. Una especie de catarsis.
http://www.diariodenavarra.es/20101010/navarra/crie-tigre-casa-tuve-hacerle-papeles.html?not=2010101001305973&idnot=2010101001305973&dia=20101010&seccion=navarra&seccion2=sociedad&chnl=10&ph=8
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