Muchos noieses miraban ayer las esquelas para interesarse por el horario de las honras fúnebre
Dos años y cinco meses después, César Juanatey regresó ayer con sus abuelos, aunque, para desgracia de toda su familia y la de todo un pueblo que la apoya, lo hizo para recibir sepultura en su tierra natal. Sus restos llegaron a primera hora de la mañana al aeropuerto de Alvedro procedentes de Madrid y, posteriormente, fueron trasladados al tanatorio de Noia. Por expreso deseo de la familia, el féretro permanece desde entonces en el tanatorio sin realizar velatorio. Poco antes de las cuatro de la tarde de hoy está previsto trasladarlo a la iglesia de San Martín para celebrar una misa de Ángeles y, a continuación, proceder a su inhumación en el cementerio parroquial de Santa Cristina de Barro.
La llegada de los restos del niño ha provocado una gran expectación en la localidad noiesa, ya que la noticia de su muerte causó un gran estupor en todo el pueblo por las circunstancias trágicas que la rodearon. La madre del menor, Mónica Juanatey Fernández, reconoció ante la Policía haberlo ahogado en la bañera a los diez días de estar viviendo con ella y con su pareja en Menorca, y actualmente se encuentra en prisión preventiva.
Los restos del niño fueron hallados a finales del pasado mes de noviembre, dos años después de su muerte, dentro de una maleta en la isla menorquina.
Una vez conocido que ayer llegaba a Noia el ferétro con los restos de César Juanatey, los vecinos comenzaron a acercarse a los lugares habituales de la localidad donde se colocan las esquelas para interesarse por el horario de las honras fúnebres. En las mismas figura como padre del menor el joven de Lousame que fue la última pareja de Mónica Juanatey antes de que ésta se marchase a Menorca.
Al parecer, y según apuntaron fuentes cercanas a la familia, los abuelos del niño decidieron no hacer velatorio por recomendación de la empresa funeraria y probablemente para evitar grandes aglomeraciones de gente que les hicieran más duro pasar estas horas previas al entierro.
El Juzgado de Mahón autorizó a principios de este mes el traslado de los restos de César para que sean inhumados en Noia. El niño fue asesinado cuando sólo tenía nueve años.
Tras el hallazgo del cadáver del menor, el pasado 23 de noviembre, en una zona de difícil acceso en Binadalí, éste fue remitido por el Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Baleares al Instituto Anatómico Forense de Palma, donde se llevó a cabo la identificación.
Después, los restos fueron enviados a la Comisaría General de la Policía Científica de Madrid para que los peritos del departamento de antropología forense pudieran concluir la investigación iniciada en Mahón y Palma. Hoy, al fin, podrán descansar en paz.
http://www.elcorreogallego.es/galicia/ecg/cesar-volvio-casa-dos-anos-despues-hoy-sera-enterrado/idEdicion-2010-12-15/idNoticia-620825/
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