22-08-2011
En Italia la justicia determinó que los padres divorciados deben mantener a sus hijos hasta que ellos lo decidan, aunque sean mayores de edad y tengan un trabajo con el cual ganarse la vida.
El fallo fue emitido por la Suprema Corte de Justicia a partir de una demanda que presentó y perdió un padre identificado como Antonio R, un jubilado de la región de Toscana quien quería dejar de darle a su hija, Teresa, de 25 años y de profesión contadora, una mensualidad de 150 euros pactados cuando el hombre se divorció de su mujer.
Teresa argumentó que necesitaba el dinero para complementar los 650 euros que gana como vendedora en una tienda."La profesión de los contadores ya no es requerida como antes, y el salario de la joven no es suficiente para que se mantenga autónomamente", sentenció el máximo tribunal italiano.
"Los padres están obligados a mantener a sus hijos mayores de edad si éstos no son autosuficientes económicamente y aún no perciben un salario en línea con el mercado del trabajo".
El caso ha causado polémica en Italia, pues para muchos evidencia los crecientes conflictos familiares que ha generado la crisis económica, que ha golpeado sobre todo a las clases medias y bajas."Casos como el de Teresa surgen cuando hay conflictividad familiar y por eso es justo que el padre le otorgue su mensualidad si se ha probado que ella no puede mantenerse", dijo a REFORMA Alessandro Ciardiello, presidente de la Asociación "Padres separados", que reúne a más de 3 mil padres e hijos fruto de relaciones matrimoniales frustradas.
Ciardiello explicó que su asociación no aboga por convertir a los hijos en "parásitos sociales" pero que considera un deber de los padres dar estabilidad a sus hijos aun si son mayores de edad, si pasaron por un divorcio."Esta sentencia está reconociendo que hay un cambio de hábito en Italia, que nuestras familias se están haciendo cargo de aquellos jóvenes que, a pesar de ser capacitados, no logran independizarse por la crisis", agregó.
Según datos del Instituto Italiano de Estadística (Istat), los italianos de entre 30 y 34 años que viven en la casa de sus padres por problemas económicos se han triplicado con respecto a las últimas tres generaciones, llegando actualmente a 28.9 por ciento.
Una investigación de la agencia de estadísticas Axa Mps indicó que 60 por ciento de los jóvenes italianos entre 18 y 34 años no se sienten cómodos con sus trabajos, a la vez de que 39 por ciento dice que se sentiría más feliz si su situación laboral mejorara, mientras que 45 por ciento afirma tener dificultades para cumplir con el pago de sus créditos bancarios y el alquiler.
"Tanto la sentencia como estos datos dicen algo muy claro: el Estado italiano ha fracasado en garantizar los derechos básicos a los jóvenes y las familias son las que pagan. De alguna forma, es un regreso a un sistema patriarcal", explicó Samia Kouider, socióloga especializada en Derechos Humanos.
"Aquí no es la ley que exige algo, son las reglas de la sociedad que se imponen pues la generación anterior ha gozado de beneficios que estos jóvenes no tendrán".
No es la primera vez que la Suprema Corte se pronuncia a favor de hijos de padres divorciados, obligando a los padres al pago de una pensión. En 2010 la corte obligó a un artesano a mantener a su hija de 32 años pues aún estudiaba, y ese mismo año también se exigió a un conocido cantante italiano el pago de 5 mil 164 euros en favor de sus dos hijas, ambas adultas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario