Dos exmonjas asesinas se casan entre sí en un penal

Viernes, 27 de Septiembre, 2013

Las dos mujeres fueron condenadas en 2009 por el crimen de la docente Beatriz Argañaraz, en Tucumán. El cuerpo de la víctima nunca apareció. Temen que se cierre un pacto de silencio

Las dos eran monjas y una quería ser la directora de la escuela religiosa. Por celos mataron, tiempo después fueron detenidas. Ahora se casan entre ellas en un penal de Tucumán.
Se trata de Susana Acosta y Nélida Fernández, quienes ya tienen una hija adoptiva de 15 años. Las dos mujeres fueron condenadas por el crimen de la docente Beatriz Argañaraz, cometido el 31 de julio de 2006.
La ceremonia íntima se realizará hoy en el penal en el que se encuentran detenidas y contará con la participación de sus familiares, compañeras de encierro y un juez de paz.
Las ex monjas convivían desde que abandonaron los hábitos, pero nunca formalizaron su relación sentimental pese a la vigencia de la ley de matrimonio igualitario.
Las presas no comparten celda ya que el pedido que hicieron al respecto le fue rechazado por la Justicia y se prevé que podrán gozar de autorizaciones de salida los fines de semana para fortalecer lazos familiares a partir de mediados de 2016.
El pedido de casamiento fue concedido luego del receso de invierno, y las reclusas ya consiguieron el turno en el Registro Civil para que un juez de paz asista a la cárcel de mujeres, ubicada en Banda del Río Salí.
Según lo establecido por el Código Penal, Acosta y Fernández podrán pedir desde el 5 de agosto de 2016, el beneficio de salidas transitorias durante los fines de semana para afianzar lazos familiares, e incluso podrán pedir que las autoricen a salir de lunes a viernes si consiguen un trabajo.
El cuerpo de Argañaraz nunca fue encontrado pese a los numerosos rastrillajes realizados en Tucumán y en provincias cercanas.
Por el crimen también fue acusado el hermano de Fernández por el delito de encubrimiento, aunque luego fue absuelto por falta de pruebas.
La principal hipótesis del hecho es que las monjas asesinaron a Beatriz ya que ella iba a ser ascendida al cargo de directora del colegio Padre Roque Correa el mismo día que desapareció, puesto al que también aspiraba Acosta.
Liliana Argañaraz, hermana de la víctima, criticó el casamiento al afirmar que "están en todo su derecho de poder contraer matrimonio pero este vínculo sellará el pacto de silencio que ellas tuvieron y mantienen, mientras nosotros continuamos abocados a la búsqueda de Betty".
Una demanda al Estado por 800 mil pesos
Aunque el cuerpo de Beatriz Argañaraz nunca apareció, los jueces de la sala V de la Cámara Penal condenaron a las ex novicias a 20 años de prisión por el homicidio de la docente. Fueron claves los rastros de sangre de "Betty" hallados en el departamento de las mujeres.
Luis Fernández, hermano de una de las detenidas,  espera que avance la demanda que presentó contra el Estado provincial por los dos años y medio que estuvo detenido. El hombre trabajaba como remisero y es hermano de Nélida Fernández.
Pero como los jueces consideraron que no había pruebas para sostener esa acusación,  lo absolvieron. Luis Fernández presentó una demanda reclamando una indemnización de $ 800.000.

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